Argentina puso corazón, nunca bajó los brazos y es campeón del mundo

Argentina es campeón del mundo, y no importa nada más.

La historia dirá que fue por un triunfo 4-2 en los penales, con un Dibu Martínez gigante, luego de que ganaba por 2-0 y tenía una actuación soberbia. Ya no importarán los dos goles de Mbappé, esos golpes que parecían matar el sueño cuando faltaban sólo 10 minutos, con los que Francia igualó el partido en los 90 minutos. Tampoco el que anotó el 10 francés en el tiempo suplementario después del que había hecho Messi para el 3-2. Nada importará. El 3-3 es historia. Argentina es campeón del mundo y el país celebra su tercera copa mundial.

Argentina había hecho todo para alzar la copa, fue a buscar lo que le correspondía, lo que el futbol le debía al astro rosarino y si bien sufrió bastante, el gol de Montiel desde los doce pasos, el que le puso fin a un partido para el infarto, desató la fiesta en el estadio Lusail, pero no sólo ahí sino en todos los rincones del país. 

Y esa búsqueda se notó desde el primer tiempo. Desde el arranque, el plan ideado por Lionel Scaloni salió a la perfección. La inclusión de Ángel Di María por la banda izquierda y el dibujo 4-4-2 elegido para la ocasión sorprendió a los galos, que sufrieron la impronta argentina y no pudieron gravitar con la velocidad de Mbappé y Dembelé.

Los dirigidos por el hijo prodigo de Pujato, y con el liderazgo de Messi, marcaron los hilos a lo largo de la etapa inicial, apoyándose en un gran trabajo colectivo, con mucha concentración y puntos muy altos como los de De Paul, Fernández y Mac Allister. Y todo eso se sustentó bajo la suela de Messi, que fue el líder en los ataques, y con la explosión de Di María, muy gravitante en la etapa inicial.

"Fideo" volvió loco a su marcador y en esa zona encontró la llave para romper el cero. Y eso se produjo a los 22 minutos cuando el ex Rosario Central recibió una falta de Koundé dentro del área y la figura del PSG, con un remate preciso, puso el 1-0 de penal.

A partir de ahí, con la ventaja, el dominio argentino se acrecentó, ya que los franceses, más cómodos con el repliegue y con  el salir de contra, no pudieron contrarrestar la envestida del seleccionado nacional. El medio fue ganado por los de Scaloni y las figuras gala como Mbappé, Griezmann, Giroud y Dembelé no pudieron gravitar.

Con ese panorama, Argentina le cedió un poco de espacios al rival y cuando pudo le aplicó gol de su receta: un contragolpe letal. Y fue un golazo. La arrancó Molina, la siguió Mac Allister y la jugada continuó con Messi, Álvarez, de vuelta con el surgido en Argentinos Juniors y la frutilla la puso Di María, que anotó el 2-0 de la tranquilidad.

La superioridad argentina era tal que el entrenador francés realizó dos cambios antes del entretiempo. Salió Giroud y Dembelé, y entraron Muani y Thuram. Y eso se ratificó en el complemento. El equipo nacional siguió con su predominio y controló como quiso hasta los 35 minutos del segundo tiempo. 

Sin embargo, Francia no es un equipo cualquiera, tiene sus individualidades, sus estrellas que pueden ganar partidos, y aparecieron en el momento más delicado. Y el que apareció en su esplendor fue Mbappé, que había sido bien marcado durante todo el encuentro, para convertir el penal cometido contra Thuram y anotar, un minuto más tarde, el empate 2-2.

Esos dos goles fueron dos golpes durísimos, el sueño parecía que se escurría de las manos y todo se estiró al suplementario. Ahí Argentina volvió a poner corazón, fútbol y carácter y en el inicio del segundo tiempo consiguió el tan ansiado gol, el que anotó de rebote Messi tras un remate de Lautaro Martínez para poner el 3-2. Sin embargo, la historia decía que había que sufrir. Y los franceses, en la primera que tuvieron, aprovecharon un penal por mano de Montiel y Mbappé puso el 3-3 a cuatro minutos de final. Y en más. El Dibu, antes de ser figura en los penales, se tuvo que lucir para tapar un mano a mano increíble cuando faltaban segundos para el pitazo final.

Y en la definición desde los doce pasos, el marplatense volvió a vestirse de héroe: el arquero del Aston Vila  le atajó el remate a Coman y vio como el disparo de Tchouameni se fue desviado para acomodar la tanda de penales. Los argentinos, con una eficacia plena, convirtieron por intermedio de Messi, Dybala, Paredes y el último de Montiel. Y sí, ahora no importa nada: Argentina es campeón del mundo.

Formaciones

Argentina: Emiliano Martínez; Nahuel Molina, Cristian Romero, Nicolás Otamendi, Nicolás Tagliafico; Ángel Di María, Rodrigo De Paul, Enzo Fernández, Alexis Mac Allister; Lionel Messi y Julián Álvarez. DT: Lionel Scaloni.

Francia: Hugo Lloris; Jules Koundé, Raphael Varane, Dayot Upamecano y Theo Hernández; Aurelien Tchouaméni y Adrien Rabiot; Ousmane Dembélé, Antoine Griezmann y Kylian Mbappé; Olivier Giroud. DT: Didier Deschamps.

Goles: PT, 23m. Messi (A) y 36m. Di María (A); ST, 35m. Mbappé (F) y 36m. Mbappé (F); STE 4m. Messi (A) y 12m. Mbappé (F). Cambios: PT, 40m. Marcus Thuram por Dembelé y Randal Kolo Muani por Giroud (F); ST, 19m. Marcos Acuña por Di María (A); 26m. Kingsley Coman por Griezmann y Eduardo Camavinga por Hernández (F); PTE, al inicio Gonzalo Montiel por Molina (A); 5m. Youssouf Fofana por Rabiot (F); 12m. Leandro Paredes por De Paul y Lautaro Martínez por Álvarez (A); STE, 7m. Ibrahima Konate por Varane (F) y 10m. Germán Pezzella por Mac Allister (A) y 15m. Dybala por Tagliafico (A) y Axel Disasi por Koundé (F). Amonestados: Enzo Fernández, Acuña, Paredes, Montiel y "Dibu" Martínez (A). Rabiot, Thuram y Giroud (F). Penales: Mbappé y Kolo Muani convirtieron para Francia; Messi, Dybala, Paredes y Montiel anotaron para Argentina. "Dibu" Martínez le tapó el remate a Coman (F) y Tchouanémi (F) desvió su remate. Árbitro: Szymon Marciniak (Polonia). Estadio: Lusail.