Diego Eterno: las frases de Maradona que aún emocionan en el Sur
Inmortal. Maradona dejó una infinidad de frases célebres, pero hay dos que marcaron a los hinchas de Lanús y Banfield y que será difícil de olvidar.
A lo largo de su vida, Diego Maradona dejó frases que pasaron a la inmortalidad y todavía resuenan fuerte, como si el tiempo no hubiese pasado. "Me cortaron las piernas", "Segurola y La Habana" o "La pelota no se mancha", fueron algunas de sus frases más célebres, pero la lista es inmensa. Y en esa lista, Lanús y Banfield tienen su lugar.
Hoy, cuando Diego hubiese cumplido 62 años y cada vez más cerca del segundo aniversario de su fallecimiento, recordamos dos momentos icónicos en el que el astro del fútbol habló del Granate y el Taladro.
"EN EL SUR, TODOS SOMOS DE LANÚS"
Esta frase, una de las icónicas de Maradona, es de 2007 después del título que logró el Granate en el Torneo Apertura de ese año, la primera estrella del club en el fútbol argentino, y fue en respuesta a otra frase, también muy recordada, de Néstor "Pipo" Gorosito, que había dicho que "en el Sur, el 70% son hinchas de Banfield".
El Diego, que nació en el Hospital Evita de Lanús y siempre se mostró muy afectivo con el club ubicado en Guidi y Cabrero, no le gustó la frase de Pipo y cuando tuvo la oportunidad, lanzó la suya: "Yo me enojé con Gorosito. Lo que pasa es que Gorosito es de Barrio Norte, no sé dónde habrá nacido, porque no puede decir que el 70% es de Banfield. Está bien que esté enojado con la gente de Lanús, lo entiendo, pero no puede decir que el 70 por ciento es de Banfield si somos todos de Lanús. Banfield tiene su gente, pero no puede decir semejante burrada.
"CONOCÍ A LA GENTE DE BANFIELD Y ME ENAMORÉ"
Esta frase, de otra etapa de vida y ya como entrenador de Gimnasia de La Plata, se dio luego del empate entre el Taladro y el Lobo por la fecha 15 de la Superliga, en noviembre de 2019 y en el estadio Florencio Sola. Fue en la conferencia de prensa post partido y en la que el Diego se mostró muy emocionado por todo el cariño recibido, con varios regalos incluidos: dos cuadros pintados con su imagen, las camisetas de Nicolás Bertolo y Jesús Dátolo y una terrible ovación que bajó de todas las tribunas.
"Yo no creí que fuera tan querido en un lugar en el que viene a jugar una sola vez. La verdad que conocí a la gente de Banfield y me enamoré. Sin agredirme, sin tirarme nada. No me esperaba el aplauso, no esperaba nada de eso, y me encantó", remarcó en ese momento y su frase, como pasó con tantas otras, pasó a la inmortalidad y es disfrutada por los hinchas del Taladro.