Así se preparan alumnos del San Bonifacio para el Desafío ECO YPF
ORGULLO LOCAL. Los estudiantes de 4º, 6º y 7º año construyeron un auto eléctrico para competir en la carrera de la que participan escuelas de todo el país, desde 2013.
Los estudiantes de 4º, 6º y 7º año del Instituto Tecnológico San Bonifacio debutarán en el tradicional Desafío ECO YPF, la competencia de autos eléctricos construidos por alumnos de distintas escuelas del país que se desarrolla desde 2013. La premisa de la competencia es concientizar sobre el uso eficiente de la energía renovable, entre el 1 y 4 de diciembre, en San Carlos de Bariloche.
La idea de participar en el Desafío, desarrollada tradicionalmente en el Autódromo Óscar y Juan Gálvez de la Ciudad de Buenos Aires, fue del profesor Javier Pérez que dicta la materia Proyecto y Diseño Electromecánico.
El equipo está integrado por Gabriel Gaburro, director de la escuela de Lomas de Zamora. En diálogo con Diario La Unión, brindó detalles del proyecto y expresó lo que significa poder participar de esta cita deportiva.
"Tiene una representación sumamente importante porque el Instituto Tecnológico San Bonifacio tiene 52 años de trayectoria. Pero esto no significa que sea un colegio rico, sino que es uno al que vienen chicos de las zonas más vulnerables, de La Ribera y del centro urbano. Como tenemos el ideario de que las posibilidades son para todos, entonces para chicos que no tengan cercanía tecnológica esto representa como algo cercano a decir 'estoy construyendo mi propio auto'", señaló.
En ese sentido, la autoridad de la entidad educativa lindante al Parque Eva Perón destacó que "esto no es algo menor porque en otra instancia, los alumnos nunca hubieran estado ante esta posibilidad, el solo hecho de esta manifestación que me hizo uno de los pibes ya ganamos".
"La ganancia está en el interés y saber de cada estudiante, quién si se propone con colaboración y trabajo en equipo, logra sus objetivos. Es algo muy importante para lo que proponemos como educación integral, no solo cognoscitiva y tecnológica sino también que hay un background en el ser persona. Nuestro lema es 'hay que conocer, hacer, saber hacer y aparte ser", manifestó Gaburro.
El director del Instituto Tecnológico San Bonifacio resaltó que el Desafío ECO YPF "significó la integración de la familia porque los proyectos lo suelen hacer estudiantes con docentes de su especialidad específica".
"Se dio la particularidad de padres que no tenían nada que ver con la mecánica y estuvieron apoyando a los chicos. Inclusive, en horarios contra turnos funciona un centro de formación para adultos donde hay mecánica y algunos decidieron anotarse en el curso para estar a la altura de sus hijos que están construyendo su auto propio. Como director significa un aliciente", aseguró.
Los alumnos del colegio San Bonifacio que participaron en la creación del auto de carreras del desafío ECO YPF: en Electromecánica, por de 7ºC son Ezequiel Maffei, Lucas Murakoshi, Luis Mustafá, Ignacio Puig, Lautaro Roldán (piloto), Agustín Sánchez Bristot, Nicolás Servidio, Matías Silvestrini, Julián Suárez, Mariano Taranto, Nahuel Velino y Gerónimo Vilar (piloto suplente). Mientras que por 4C la lista la componen Juan Baron, Martin Casalnuovo, Mauro Cilento, Santino Faratro.
El equipo de electrónica está integrado por: De 7D, Nicolás Barlasina, Benicio Rodríguez; de 6D Santiago Dri, Nicolás Duarte, Leandro Ponte Recalde, Alan Völker. Y, en el sector de Construcciones: por 4º figuran Milagros Rincón (pilota).
Toda insistencia, tiene su recompensa
Si bien la competencia se desarrolla desde 2013, Gaburro reveló que por distintos motivos vinculados al financiamiento económico nunca habían podido participar. Sin embargo, este año el colegio se tomó revancha, se dieron las condiciones para que pudieran estar presente a partir del aporte realizado por distintas empresas y el trabajo en equipo entre distintas especialidades.
"Veníamos con ganas de aquella época con ganas de participar, pero por falta de recursos o por cuestión de índole interna que nos lo impedían. Este año surge nuevamente la idea y se lo planteamos a los estudiantes, entonces surgió algo muy interesante: desde el seno estudiantil, tanto alumnos de 7º año como de 4º año. Entre las tres especialidades armaron un equipo interdisciplinario para abordar la construcción del auto eléctrico y poder competir", precisó.
El referente de la institución explicó que ante "el inconveniente del hacer el abordaje económico de este proyecto sabiendo en la situación compleja en la que estamos, había que encontrar el financiamiento, donde empresas nos apoyaron empresas que como contraprestación va a estar ploteado el auto con propaganda".
Entre las firmas que apoyaron esta iniciativa han sido Elecnor Argentina S.A, Somarfer S.A- tomador de prácticas profesionalizantes, además de la empresa de padre de un alumno: Mecanicus de Gustavo Calice.
Por su parte, Gaburro remarcó que en este proyecto "hay una interacción particular y única en el fomento de saberes, ponerlo a la práctica desde el interés propio del estudiante".
"En vez de que sea algo enciclopedista, vamos por la parte práctica donde confluyen distintos talentos en cada persona que tiene un talento particular. Es así como hay estudiantes que se ocuparon de la parte mecánica, y otros de electrónica que se encargaron del control automático electrónico que tiene sus distintas funciones como la aceleración", puntualizó.
La ayuda recibida por parte de exalumnos egresados
El proyecto no solo abarca a los estudiantes del colegio, sino también a egresados, como Daniel Gagliardi, quien se recibió en 2013 y tiene un taller mecánico dedicado al diseño y venta de autos de carrera, en la intersección de las calles Las Heras y Santa Fe.
"A la par se sumaron muchos exestudiantes del San Bonifacio y la respuesta fue automática. Me llamaron y se interesaron, uno de ellos tuvo su especialización en autos de carreras y ofreció su tiempo para colaborar con sus conocimientos. Fue una movida institucional, pero que surge netamente del interés del estudiante y partir de ahí, un montón de materias interdisciplinarias", indicó Gaburro.
Cómo es el auto
La carrocería del auto creado por los estudiantes del San Bonifacio es de caño estructural con chapa galvanizada. Cuando esté finalizado, puede llegar a tener una velocidad promedio de entre 50 y 60 km/h, aunque este factor depende del diseño.
"Tratamos de apuntar a la aerodinámica y al peso de la estructura de la carrocería que, en conjunto con la relación de transmisión, en el pico hace que adquiera o gane mayor velocidad. Claro que todo esto tiene que tener varios comandos que hemos diseñado con una plaqueta electrónica donde esos comandos se adaptan a la regulación del motor", precisó Gaburro.
A su vez, el director del colegio indicó que el sistema de frenado fue reestructurado. "Actualmente los autos tienen el freno en la mano y lo adaptamos para que estén en los pedales, lo que también implican un diseño. Estos autos quizás deberían tener un mayor radio de giro, el cual es acotado, para el circuito donde van a circular", evaluó.
Cómo es el desafío ECO YPF
A diferencia de otras ediciones, esta es la carrera de los 10 años que se llevará a cabo en San Carlos de Bariloche, entre el 2 y 4 de diciembre. De la competencia participarán un centenar de escuelas de todo el país entre las que figuran, además la Escuela Tecnológica Ingeniero Giúdici (ETIG) que funciona bajo la tutela la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Lomas de Zamora, y la Escuela Técnica Secundaria N°5, de Temperley.
Al igual que otros años, el desafió consistirá estará en cinco etapas: un Sprint femenino, Flying Lap, Challenge Setup, 1/8 de Milla y Endurance -esta prueba dura 80 minutos, con cambios de pilotos en el medio, e implica un circuito callejero que estaría comprendido entre el Centro Cívico y Lagustillo.