Arranca el juicio por el crimen del diácono de Temperley
ESTE JUEVES. El TOC N°3 de Lomas llevará adelante el proceso judicial por el crimen de Guillermo Luquín, hallado asesinado en su casa. Los sospechosos se entregaron en Villa Galicia.
El juicio por el crimen de Guillermo Luquín, el diácono de la Diócesis de Lomas que fue asesinado en su casa de Temperley, arrancará este jueves, a una semana de que se cumplan tres años de lo sucedido.
Tal como había anticipado en exclusiva La Unión, el proceso judicial se llevará a cabo este jueves por la mañana, en los Tribunales de Lomas, y estará a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°3.
Si bien indicaron que el juicio sería de "una sola jornada", existe la posibilidad, "de ser necesario", de que se agreguen "más fechas", recalcaron a este medio.
Por el asesinato de Luquín se encuentran detenidos y serán juzgados dos jóvenes: Roberto Javier Céspedes y Leonel Iván Martínez. Están imputados por el delito de "homicidio en concurso con robo agravado".
La causa se encontraba en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°6 de Lomas, pero ya se encuentra en la Unidad de asistencia y colaboración para el Juicio común y el Juicio por Jurados.
EL CASO
En poco más de dos meses se cumplirán tres años del hecho. Luquín era empleado bancario y diácono de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, de la Diócesis de Lomas. El domingo 9, como no fue a la iglesia, su sobrino fue hasta su casa situada en Bombero Ariño 829, de Temperley, y lo halló asesinado cerca de las 12.30.
El cadáver estaba desnudo y envuelto en sábanas y la autopsia determinó que fue degollado y que presentaba otros cortes en el cuerpo, signos de defensa y un fuerte golpe en la cabeza.
Una huella dactilar hallada en una copa de cristal identificó a Céspedes como sospechoso y cuando los investigadores lo estaban buscando, se entregó en la Comisaría de Villa Galicia junto a su novio, Martínez, para hacerse cargo del homicidio.