Un local en pleno centro lomense homenajea al campo y a las raíces argentinas
FECHA PATRIA. "Gente de campo" se dedica desde hace 51 años a la venta de artículos regionales, como ponchos o mates. Es muy visitado por vecinos que se van o regresan del país.
"Gente de campo" es una perla escondida en Lomas. Un local que se dedica a la venta de marroquinería y artículos regionales, donde vecinos que vuelven o se van del país a vivir o a visitar familiares y amigos aprovechan a comprar un recuerdo.
"Una emoción constante". Así describe Manuel Velay, el dueño, el momento en el que entabla una relación con el cliente que va mucho más allá de la comercialización de un producto. La historia de los inicios, las artesanías más pedidas y el boom del local en plena fecha patria.
Ubicado en Boedo 323, el negocio comenzó a funcionar en la década del '70 y ya tiene 51 años de historia. "Todo empezó casi de casualidad. Como hijo de marroquinero, nos dedicamos siempre al oficio. Esto fue fundado por Víctor Mastromarino, que era nuestro cliente y que luego decidió dejar el local de la marroquinería. Cuando nosotros lo tomamos no teníamos idea de lo que eran los artículos regionales", rememoró sobre sus inicios, siendo un adolescente.
"En las primeras semanas los clientes nos pedían mates y bombillas, entonces decidimos traer artículos regionales y fue un éxito. Hoy por hoy es un 70% de artesanías", recalcó.
Manuel contó que muchos vecinos que se fueron del país y vuelven por algún motivo suelen visitar su local para adquirir algún recuerdo, como así también aquellos que se van al exterior a vivir o a visitar familiares o amigos: "Ese momento, en el local, es una emoción constante. La mayoría se lleva desde un imán para heladera hasta un mate, cualquier cosa que tenga la inscripción 'Argentina' tiene una importancia sublime".
Ese momento, en el local, es una emoción constante. La mayoría se lleva desde un imán para heladera hasta un mate, cualquier cosa que tenga la inscripción 'Argentina' tiene una importancia sublime.
"Mantenemos un sentido de precio y producto, entonces la gente se siente identificada", sostuvo. Al ser consultado sobre los productos más vendidos, Manuel dijo que el poncho es uno de ellos por ser un producto barato para fabricar, ideal para abrigarse o para decorar, además de cinturones de cuero, riñoneras, billeteras, pero la artesanía más requerida es, sin duda, los mates, sobre todo los imperiales. "Nunca pensé que iba a vender tantos mates y bombillas en mi vida. Con la pandemia se vendieron mucho más, ya que cada uno tiene el propio".
Respecto al mate imperial, Velay reveló que es muy solicitado por ser "bocón": la calabaza en la cual se fabrica es de origen brasilero y la virola es de alpaca, el detalle que resalta y llama muchísimo la atención.
Al ser consultado sobre los productos más vendidos, Manuel dijo que el poncho es uno de ellos por ser un producto barato para fabricar, ideal para abrigarse o para decorar, además de cinturones de cuero, riñoneras, billeteras, pero la artesanía más requerida es, sin duda, los mates, sobre todo los imperiales.
Lo primero que llama la atención del negocio son el gaucho y la gaucha que custodian la puerta de entrada, en una plena representación del folklore argentino y que recuerdan a la época de la Revolución de Mayo. "Los hice porque la misma gente me fue llevando a realizarlo. El argentino es muy nacionalista, bien criollo, amante de los caballos y viene a comprar ponchos, boinas y boleadoras", resaltó Velay.
Para finalizar, Manuel reveló que, desde que tiene su local, ha vivenciado una "infinidad de anécdotas", a tal punto de poder escribir un libro con ellas: "Todos coinciden en que no hay persona como el argentino, que se preocupa por el otro, es amigo y familiero".