"Jorge y Ozil", la peluquería de Lomas atendida por su dueño y su perro
FAMOSOS. Con esta dupla al frente, el local es un ícono de Villa Galicia. Los clientes adoran a Ozil y le llevan regalos. Y Jorge es pura pasión: "Pienso cortar el pelo hasta que me tiemblen las manos".
Por fuera, la peluquería ya promete mucho. El cartel que dice Jorge y Ozil y una foto de su dueño y su perro acaparan miradas. Tantas que su fachada fue publicada por The Walking Conurban, el famoso grupo que recolecta fotos llamativas de la región y que hoy tiene más de 340 mil seguidores en Instagram. Además, el mismo cartel ofrece descuentos a jubilados, discapacitados y calvos, un combo hermoso en medio de Villa Galicia desde hace más de 20 años.
Pero eso no es todo: por dentro, un espacio lleno recortes fotográficos y periodísticos, objetos antiguos y camisetas de fútbol. También historias que contar, con dos protagonistas como Jorge Gómez (59) y su fiel compañero de cuatro patas Ozil, quienes comparten a diario el afecto por los clientes. El peluquero lomense, veterano de Malvinas, contó su dura infancia, los duros golpes que debió atravesar en la vida y la devoción por los perros.
Jorge empezó a cortar el pelo cuando tenía 20 años. Y el oficio viene de familia, ya que sus primeros pasos los dio en una peluquería que tenía su mamá en Burzaco. "Trabajé en relación de dependencia y en 1994 me decidí a hacer el curso. Desde ahí tuve en claro que el corte es para todos, no se salva nadie, ni los pelados", empezó a contar Jorge, entre risas, ya demostrando su personalidad y un ambiente distendido.
La infancia de Gómez, en Santiago del Estero, fue muy dura: "Crecí sin padre y en varias ocasiones sufrí violencia por parte de las personas que me criaron". Por la falta de hermanos, fueron los perros los seres vivos por los que Jorge sintió más afecto y amor, sin saber que mucho tiempo después un canino lo iba a acompañar en su rutina.
Esa devoción por los perros no cambió e incluso se acrecentó en la adultez, a tal punto que Jorge pudo unir sus dos amores en un solo espacio. "Mesut Ozil es un perro que me cambió la vida. En 2012, el periodista Javier Lozano me ofreció un perrito y lo fui a buscar, pero como hacía lío en mi casa me lo traje a la peluquería", contó. Así comenzó una hermosa relación, no solo de Jorge con Ozil, sino del perro con los clientes, que "les traen juguetes para que pase el tiempo, lo quieren mucho".
Acá me siento acompañado. Tengo una foto de mi hermano, que falleció, y un diploma por haber hecho el servicio militar. El próximo 2 de abril cumplo cuatro décadas como veterano de Guerra de Malvinas, aunque no estuve en la Isla sí me trasladaron a Puerto Deseado para vigilar una posible invasión inglesa. Es otra experiencia más que me formó como persona.
Jorge y Ozil (Vélez Sarsfield 07) es una de las pocas peluquerías de barrio que se mantiene de pie. Y sus paredes "hablan" ya que cuentan con recortes de diarios, objetos y artefactos de antaño (como una radio a válvula) e incluso camisetas y shorts de fútbol que los propios clientes le fueron trayendo para que pueda exhibir. Esas cuatro paredes albergan una especie de museo en pleno Villa Galicia.
"Acá me siento acompañado. Tengo una foto de mi hermano, que falleció, y un diploma por haber hecho el servicio militar", dijo, e inmediatamente agregó: "El próximo 2 de abril cumplo cuatro décadas como veterano de Guerra de Malvinas, aunque no estuve en la isla sí me trasladaron a Puerto Deseado para vigilar una posible invasión inglesa. Es otra experiencia más que me formó como persona".
Jorge es muy querido en el barrio y el afecto que le demuestran a diario los vecinos va más allá de su profesión.
Jorge es muy querido en el barrio y el afecto que le demuestran a diario los vecinos va más allá de su profesión. "Yo atravesé muchas cosas malas y no quisiera devolvérselo a nadie, por eso me considero un buen tipo y hasta un gran hijo, porque a mi padrastro lo sigo visitando para ir a cortarle el pelo", recalcó.
"Pienso cortar el pelo hasta que me tiemblen las manos. Ese día, no corto más. Me hubiese gustado que alguno de mis hijos fuese peluquero, pero eligieron otra profesión e igualmente estoy orgulloso de ellos", cerró.