La estancia Campbell: le dio vida a Villa Galicia y hoy es un geriátrico

Un día como hoy, pero de 1911, se empezaba a escribir la rica historia de Villa Galicia. Este suceso se forjó en torno a la inmensa estancia del inglés Campbell, que dio inicio al barrio. Hace más de dos décadas que parte de este espacio funciona como una residencia de adultos mayores, que rememoraron diversos sucesos memorables de esta localidad.

El libro "Villa Galicia, su pasado y su presente", del historiador y periodista Juan Luis Stoppini, explica que, al inicio de 1900, el territorio que hoy compone Villa Galicia estaba rodeada de chacras y grandes quintas, entre las que se destacaba la estanzuela de Jorge Raid Campbell. Fue entonces que los señores Vicente y Pedro Casullo, José Berlaro, Aquilino Colombo y Roque Arcardini, asociados para realizar operaciones inmobiliarias, le adquirieron a Jorge Raid Campbell un total de 68 hectáreas, 20 áreas y 7 centiáreas (aproximadamente 69 manzanas) con el objetivo de subdividir las tierras en lotes y poder venderlos.

Al inicio de 1900, el territorio que hoy compone Villa Galicia estaba rodeada de chacras y grandes quintas, entre las que se destacaba la estanzuela de Jorge Raid Campbell. Los señores Vicente y Pedro Casullo, José Berlaro, Aquilino Colombo y Roque Arcardini, asociados para realizar operaciones inmobiliarias, le adquirieron a Jorge Raid Campbell un total de 68 hectáreas, 20 áreas y 7 centiáreas (aproximadamente 69 manzanas) con el objetivo de subdividir las tierras en lotes y poder venderlos. El registro de la escrituración se llevó a cabo el 26 de octubre de 1911 y se toma esta fecha como el puntapié inicial del origen de Villa Galicia.

"El registro de la escrituración se llevó a cabo el 26 de octubre de 1911 y se toma esta fecha como el puntapié inicial del origen de Villa Galicia. De esta manera, se abrieron calles, se marcaron los terrenos y, ese mismo año, comenzaron las ventas en forma directa con los interesados", relata otro fragmento del escrito de Stoppini.

Hoy en día y desde hace 26 años, este emblemático lugar funciona como la Residencia Geriátrica "Araucaria" (Prospero Allemandri 1697). Allí viven adultos mayores y trabaja hace 23 años la lomense María Pereyra, que es enfermera y cuida de los pacientes. Entre todos se encargaron de rememorar distintas anécdotas y sucesos que los marcaron a fuego en Villa Galicia.

"Mis padres vivían en la calle Bombero Ariño y Riobamba y fueron lomenses de toda la vida, en una localidad con calles de tierra y en donde todavía no había agua corriente. Ahí me crie y vivencié cosas maravillosas, como cuando se comenzó a construir la Capilla Nuestra Señora del Carmen, en 1936, otro emblema de esta zona", contó Elsa Acha, de 89 años, que inmediatamente explicó que de chica fue a la Escuela Láinez Nº45 hasta el cuarto año y después se pasó a la Escuela Nº13.

"Yo sabía que este lugar era una quinta de origen inglés muy importante, veníamos los domingos a ver este casco de estancia", acotó la residente.

Nunca imaginamos que la quinta de Bell se iba a convertir en nuestro hogar, donde compartimos tiempo entre todos y hasta festejamos los cumpleaños.

Otro de los sucesos importantes en la localidad fue la aparición del transporte público gracias a la línea 32, actualmente conocida como la línea 266. "Recuerdo que uno de los choferes apodó al colectivo como 'el caimán', porque era cortito y de color verde", detalló Armino Vieira, vecino de Villa Galicia desde 1961 y otro residente del geriátrico. "Había solamente dos unidades y hacían el recorrido hasta el Matadero Municipal de la calle Campos", acotó Elsa, muy cerca y atenta a la conversación.

"Nunca imaginamos que la quinta de Bell se iba a convertir en nuestro hogar, donde compartimos tiempo entre todos y hasta festejamos los cumpleaños", cerró Elsa, en compañía de sus compañeros, muy emocionada.