Caso Ángeles Rawson: declaran el hermanastro mayor y sus amigas

La novena jornada del debate se iniciará a las 9, en la sala de audiencias del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 porteño, en el sexto piso del Palacio de Tribunales de Talcahuano 550.

Las primeras tres testigos serán Camila Navarro, María Salomé Puebla y Florencia Habeger, las amigas de la escuela que la mañana del 10 de junio de 2013 se despidieron de Ángeles luego de la clase de gimnasia que hicieron en el predio de la Ceamse de Colegiales.

También declararán la profesora de gimnasia, Claudia Knez; la directora, Viviana Urichipia; y otras dos docentes y personal directivo, Marta Graciela López y Analía Vélez de Villa; todas del Instituto Virgen del Valle donde Ángeles cursaba la secundaria y era abanderada y mejor promedio de todo el colegio.

Otro de los testigos centrales será Jerónimo Arellano Villafañe, el medio hermano mayor de Ángeles por parte de la mamá, que al principio del juicio no pudo declarar porque estaba en el exterior.

También fue citada María Elena Leuzzi, la titular de Avivi, que en su momento sumó a la causa algo de confusión ya que estuvo en el departamento de Ángeles el 11 de junio de 2013, cuando apareció el cadáver, y declaró que notó en actitud extraña al hijo adolescente del padrastro Sergio Opatowski.

Leuzzi declaró, además, que uno de los hermanos le dijo que uno de los llaveros que había en la casa era el de la víctima -lo que hizo pensar que la chica había vuelto a su casa-, aunque luego quedó claro que las llaves de la adolescente nunca aparecieron.

La titular de Avivi también fue la receptora de un celular marca LG que en su momento se pensó que podía ser el de Ángeles,

pero después se descartó que sea el aparato de la víctima, que era Nokia y nunca fue hallado.

El hombre que encontró ese celular LG tirado en el playón de la estación ferroviaria de Tigre, Juan Carlos Zapata, un chofer de ambulancias de ese municipio, también declarará hoy.

Otro testigo será el gerente de Legales del Banco Macro, Eduardo López, quien acreditó que el día del crimen, a las 10.07, Opatowski hizo una extracción por ventanilla por 4.445 pesos, de una caja de ahorro a su nombre, en la casa central de Sarmiento y Reconquista.

También comparecerá hoy la subgerente de Legales de Nación Seguros, María Isabel Romero, quien acreditó ante la Justicia qué números de tarjeta SUBE tenían algunas de las personas mencionadas en la causa, entre ellas, el imputado Jorge Mangeri, y cuáles fueron sus últimos viajes antes de quedar detenido, ya que en su momento declaró que había perdido su tarjeta.

La defensa convocó, además, a Oscar Gatti, un hombre que declaró que creía que el ex novio de su hija podía ser el asesino de Ángeles porque era violento y siempre le decía a su hija que iba a matar a una chica y no le iba a pasar nada porque era sobrino de un comisario.

A su turno declarará Juan Manuel Salgueiro, un jubilado que dijo haber visto a las 15 del 10 de junio a un muchacho de unos 25 años que empujaba un contenedor de basura desde la calle Ravignani hasta la esquina con el pasaje Voltaire.

En tanto, se presentarán cuatro nuevos testigos de la defensa que no declararon en la instrucción: Gustavo Pérez, el garagista donde guardaba el auto Opatowski; Eduardo Imas, el padre del chico que el martes 11 de junio escribió por Twitter que a Ángeles la iban a encontrar en un camión de la basura de la Ceamse, aunque esto lo sabía porque la familia tenía un amigo que trabajaba en la planta; "Juan", el portero de Ravignani 2144 y Jorge Mancini, secretario general del Ceamse.

Otro que va a declarar es Carlos Faut, apoderado de la línea 55, el colectivo en el que viajó el día del crimen la empleada doméstica Dominga Torres y quien informó que ninguno de los dos internos que habría utilizado esa mañana la mujer para llegar a Palermo sufrieron desperfectos mecánicos, tal como declaró ella.

Mientras que otros dos testigos serán policías, el subinspector Marcelo Orta, de la comisaría 31 de la Policía Federal; y el teniente Edgardo Mendoza, de la DDI de San Martín; y Roberto Calvo, un hombre que mandó a la Justicia un mail para contar que un vecino del edificio de Ravignani 2360 -el propietario del 2° B, Ángel Montanari-, había contado que se le habían ido empleadas domésticas por los acosos de Mangeri.

El último testigo de la jornada será Daniel D'Ambrosio del área de legales de la Obra Social del Personal de Edificios de Renta y Horizontal (Osperyh) , quien aportó filmaciones de Mangeri ingresando a la clínica los días de esa semana.