Lanús le dio un golpe de realidad al Celeste y le ganó en el Beranger
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El equipo de Almirón fue muy superior al de Álvarez y liquidó el duelo en el primer tiempo. Cólzera abrió el marcador de penal. Velázquez, Acosta y Sand anotaron para el triunfo Granate.
Lanús fue muy superior a Temperley y en un tiempo liquidó el partido. Le ganó por 3 a 1 y lo complicó en los promedios. En los primeros minutos, ambos salieron a proponer. Sin embargo, las diferencias en la creación de juego fueron muy evidentes.
Lanús llegaba con más peligro, utilizando los laterales y todo el ancho de la cancha. Temperley, más limitado y apelando siempre a la destreza de Cólzera, se paró de contra. A los 12 minutos, el Gasolero se encontró con la ventaja.
Lanús quedó mal parado y Ríos, en total soledad, corrió casi desde la mitad de cancha mano a mano ante Monetti que lo bajó en el área. Penal y gol de Cólzera para el 1 a 0 parcial.
Pese a la ventaja, la diferencia en la calidad de la propuesta Granate era evidente y no pasó mucho para que llegara el empate. A los 18 minutos, Velázquez cabeceó en total soledad un córner desde la izquierda y puso el 1 a 1. Temperley tuvo la posibilidad de recuperar la ventaja con dos tiros libres que pegaron en la barrera.
Tras el segundo, una contra perfecta encabezada por Almirón terminó en un remate de Acosta desde la izquierda para el 2 a 1. A partir de ahí, el Celeste perdió la brújula y entró en una crisis de nervios y falta de ideas que fueron clave para el 3 a 1.
A la salida de un tiro libre, Sánchez tocó la pelota con la mano y Delfino cobró penal. Luego, Sand lo cambió por gol. Así terminó la primera etapa. En el complemento, los estilos de ambos se acentuaron. Los futbolistas de Lanús jugaron siempre con varias opciones de pase, bien parados en defensa, rápidos y precisos para pasar al ataque, en otras palabras, como un equipo aceitado.
Los de Temperley, por el contrario, recurrieron a batallar, con muy poco traslado de pelota y llevando peligro al área de Monetti básicamente con centros, es decir, como un equipo en formación.
Sobre la media hora, Almirón pegó un tiro en el palo después de una corrida notable y, tras una jugada colectiva, el 10 desperdició otra chance sobre la izquierda. No pasó mucho más. Algo quedó claro: el Cele tendrá mucho trabajo por delante para salir del p