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Temperley dejó pasar una linda oportunidad

En el reinicio de la Primera Nacional. El Gasolero igualó sin goles en el Sur con el puntero de la zona A Estudiantes de Río Cuarto y no pudo escalar a lo más alto de la tabla de posiciones de la Primera Nacional.

En el reinicio de la Primera Nacional y en un duelo clave para la pelea por el ascenso, Temperley no pudo marcar diferencia ante el líder Estudiantes de Río Cuarto y sigue a tres puntos de lo más alto de la tabla de posiciones de la Zona A.

La realidad de ambos equipos marcó el andar del encuentro en el estadio Alfredo Beranger. Y eso se notó de entrada. Los dos sabían las cosas que ponían en juego y ninguno quiso dar un paso en falso en la noche sureña.

Por un lado, Temperley tenía en claro que era valioso quedarse con los tres puntos, pero también era consciente de que una derrota lo alejaba de la pelea de arriba. Y lo mismo pasaba con el conjunto cordobés, que llegó como líder y se enfocó en conservar ese lugar, sin perder puntos con un rival directo como el Celeste.

En ese contexto, el trámite del partido fue bastante parejo, sin grandes emociones en los arcos, y en el que ninguno logró dominar las acciones.

Si bien los de Perazzo buscaron con su receta de presión alta y mucha intensidad, las desconexiones entre González, Baldunciel, Cerutti y Messiniti hicieron mella en el rendimiento ofensivo del equipo. Y a eso se le sumó la dura batalla que tuvieron Ibáñez y Fattori con Cabrera y Bottino, en la que ganaron y perdieron y no hubo un dominador en la materia.

Eso también afectó el andar de la visita, al que le costó hacer pie en el campo rival y por eso generó muy poco en etapa inicial, solo con un remate de afuera de Cabrera y un tiro libre de Bottino.

En el complemento, la historia en el Beranger no cambió demasiado. Si bien el Gasolero tomó la iniciativa y buscó armar diferentes asociaciones, continuó con pocas ideas para la generación y tuvo pocas ocasiones de gol, sin exigir demasiado al arquero Peralta, que tuvo una noche tranquila.

Estudiantes, en cambio, se fue enamorando con el empate con el correr de los minutos, algo que se acentuó luego de desperdiciar dos contraataque, ambos en los pies del delantero Ferreira, que perdió los dos duelo que tuvo con Crivelli, que anoche llegó a los 300 partidos con la camiseta celeste y fue uno de los máximos del elenco de Perazzo.

Por este motivo, el empate fue lo más justo en la noche del Beranger.

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