Crimen del canillita: la familia apunta contra la barra de Los Andes
continúan reclamando. "Estamos manejándonos en un ambiente pesado", sostuvo la hija mayor de Enrique De Vita, el canillita asesinado en febrero de 5 disparos.
A poco más de cuatro meses del crimen de Enrique De Vita (49), el diariero asesinado a balazos a plena luz del día en Parque Barón, la familia apunta contra la barrabrava del Club Los Andes.
"Estamos manejándonos en un ambiente pesado", manifestó Agustina De Vita, la hija mayor de la víctima.
En diálogo con La Unión, la joven sostuvo que la hipótesis que maneja la familia es que el asesino de su papá, quien se encuentra prófugo, "no está solo". Se trataría de Julio Rafael Mosevich, ex marido de la pareja de la víctima, quien tiene un pedido de captura desde febrero, y ya lo habría asesinado de muerte en otras oportunidades.
"Pensamos que Julio no está solo, que lo están ayudando, sino ya tendría que haber caído", apuntó y marcó que se inclinan por la barrabrava del Club Los Andes. Es que, en los inicios de la investigación se creía que se trataba de un ajuste de cuentas entre barras.
En tanto, reforzó el pedido de información o dato relevante para dar con Mosevich. "Pido que si alguien sabe algo nos lo haga llegar, o lo diga en fiscalía", planteó.
Asimismo, precisó que no tuvieron ninguna otra novedad, y que el reclamo, en parte es a la UFI N° 3. "No realizaron nada más. No me llaman tampoco para darme algún tipo de información, nada de nada", aseguró. La joven ya había señalado a este medio en otra oportunidad que la causa estaba "estancada".
"Queremos que sigan buscando, allanando, que se fijen en conocidos del asesino, en familia", agregó.
El hecho es investigado por el fiscal Lorenzo Latorre, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial Lomas de Zamora. Mosevich está imputado del delito de "homicidio".
EL HECHO
El homicidio fue a plena luz del día y cuando el movimiento de gente en la esquina de Bustos y Olmos ya era intenso. Alrededor de las 8 de la mañana del 5 de febrero, un Volkwagen Fox gris frenó enfrente del puesto de diarios de De Vita. Se bajó un hombre, camino unos pasos, sacó un arma que tenía en la cintura y lo acribilló. Al menos, hubo cinco balazos ejecutados.
El violento homicidio que conmocionó a todo el barrio quedó registrado por una cámara de seguridad de la zona. El hombre, según se puede observar en las imágenes fue directamente a buscar al canillita, que se encontraba trabajando en la esquina de siempre.
Según fuentes oficiales, De Vita fue trasladado de urgencia a la sala de primeros auxilios 2 de Abril, donde los médicos constataron que ya había muerto.
El asesino continúa prófugo. Lo único que se sabe es que se subió a su auto y se escapó rápidamente del lugar. Los investigadores analizan las cámaras de seguridad del barrio para determinar hacia dónde fue y dónde se escondió.
