Martín Ron volvió a Banfield y prepara el mural más alto de su carrera

El arte del talentoso muralista Martín Ron está de vuelta en Banfield, en la búsqueda de poder completar su proyecto de intervenir edificios. Así como ya lo hizo con un mural ubicado en Belgrano al 1600, donde se ve a un niño con un globo, en su nuevo trabajo (a solo una cuadra de distancia) la protagonista será una niña y estará pintada en dimensiones que serán récord para Martín: 65 metros de alto y 13 de ancho, el más alto de su carrera. También aclaró que esta obra "pondrá a Banfield en el mapa global del arte urbano".

"Mi idea siempre fue terminar con el edificio anterior y empezar con el nuevo, pero la pandemia retrasó los planes y tuve que posponerlo. Por suerte acá estamos, muy contentos de volver a trabajar en este lugar", empezó a contar Martín sobre el proyecto del segundo mural, en Belgrano y Maipú, donde arrancó a trabajar el 6 y estima terminar para mediados de febrero.

La obra dialoga con el otro mural y en esta ocasión tendremos a una niña que también estará interactuando con un globo metalizado, además de construir o destruir una pared de lego.

Este nuevo mural, que mide 65 metros de alto por 13 de ancho, está emparentado con el anterior, ya que posee la misma temática. "La obra dialoga con el otro mural y en esta ocasión tendremos a una niña que también estará interactuando con un globo metalizado, además de construir o destruir una pared de lego", adelantó el artista, que admitió que la niña, en la vida real, es amiga de Fausti, el chico que se ve en el anterior trabajo hecho por Ron.

"Volví a Banfield con el ritual de siempre de saludar a mi mamá. Suelo dejar un mensaje de 'Hola mamá' en mis obras mientras hago los bocetos, pero esta vez utilicé 'Volví mamá', porque justamente fue la manera de regresar al trabajo de muralista", dijo Ron, y rápidamente agregó: "También hago garabatos, una técnica que me permite identificar coordenadas y encontrar una posición dentro de esa escala gigante. A eso también le di un tono pandémico, porque eran dibujos de virus".

Este mural contribuye a que Banfield tenga trascendencia internacional y que se ubique en el mapa global. Parece una locura lo que digo, pero el arte urbano de todo el mundo me pregunta dónde queda esta localidad.

La nueva obra de arte de Ron marcará un propio récord: con sus 65 metros de mural (el edificio mide casi 75 metros), es el de mayor altura que intervino en su exitosa carrera. "Estoy averiguando si es el mural más alto del país. Personalmente sí lo es, porque lo máximo que había pintado era uno de 57 metros", dijo, muy contento por el trabajo que actualmente realiza en pleno corazón de Banfield.

"Banfield me recuerda a mi barrio, a Tres de Febrero. Los vecinos se conocen entre ellos, son muy perceptivos y se brindan con todo el afecto. Me viven saludando desde varias ventanas y preguntando si necesito algo, es maravilloso", reconoció Ron, que inmediatamente dijo: "Este mural contribuye a que Banfield tenga trascendencia internacional y que se ubique en el mapa global. Parece una locura lo que digo, pero el arte urbano de todo el mundo me pregunta dónde queda esta localidad".

"Queríamos desplegar arte en Banfield. Hacer un mural en un edificio era una manera de devolverle algo de todo lo que nos dio la localidad. Conocimos a Martín gracias a una de sus obras, le propusimos hacer los murales en nuestros edificios y se enganchó. La idea inicial era reflejar la infancia y el barrio, íbamos a hacer un juego de escondidas y terminó derivando en los nenes con los globos", detalló Daniel, de Vidal Desarrollos, quienes construyeron las torres donde se ven las obras de Ron. Rápidamente adelantó que la idea es que Martin intervenga un tercer edificio, que todavía está en construcción y se encuentra en la calle Talcahuano, por lo que el muralista recién podría realizar esa obra allí a principios de 2022.

La nueva obra de arte de Ron marcará su propio récord: con sus 65 metros de solo mural (el edificio mide casi 75 metros) es el de mayor altura que intervino en su exitosa carrera.

La idea que tiene en mente Martín es poder terminar el mural a mediados de febrero, con un lapso coherente de realización, que va de cuatro a cinco semanas de trabajo. Para finalizar, Ron contó que su objetivo con los murales es brindar buena energía: "Yo pinto no sólo para mejorar y embellecer un lugar, sino para hacer un aporte de valor y generar lazos estrechos en la comunidad".