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La pericia necesaria para elevar a juicio el femicidio de Candela Azoya

RECLAMAN CELERIDAD. La causa ya tiene tres detenidos por el macabro crimen descubierto en noviembre pasado. La ausencia de los resultados de una pericia clave interrumpen su avance.

El caso se encamina al juicio en los Tribunales de Lomas

El caso se encamina al juicio en los Tribunales de Lomas.

Un paso clave en la investigación por el femicidio de Candela Azoya, la joven de 17 años encontrada descuartizada en noviembre del 2024, impide que la causa sea elevada a juicio.

Días atrás, el fiscal José Luis Juárez, titular de la UFI 12 de Lomas de Zamora, reclamó los resultados de una pericia química pendiente para poder avanzar en el caso, que todavía se encuentra en plena etapa de instrucción.

"Con esos resultados, se puede hacer el informe final de autopsia, necesario para la elevación a juicio", confió días atrás a La Unión una fuente cercana a la causa.

El pedido de celeridad de la autoridad a cargo de investigar el crimen se debe a que los tres acusados ya se encuentran detenidos. Por lo tanto, solo resta que sean juzgados por el macabro asesinato de la adolescente.

El ultimado apresado es Juan Ariel Resquín, quien ya cumple prisión preventiva tras las rejas, luego de permanecer prófugo casi un año. Los otros dos son Alan Vega y su hermano, Fabio Resquín, también involucrados en el traslado de cuerpo de la joven en un carrito hacia un basural, en la zona de vías de la estación Kilómetro 34 del Tren Roca.

LA RECONSTRUCCIÓN DEL CRIMEN

Candela Azoya había pactado la compra de unas zapatillas y salió de su casa el 27 de noviembre de 2024 para ir a buscarlas a la Plaza San Marta, pero no regresó. Su familia denunció enseguida su desaparición. Dos días después, se enteraron de que su cuerpo había sido hallado descuartizado y quemado dentro de una bolsa en la estación Kilómetro 34 del ramal Temperley-Haedo.

Horas después, empezaron a saberse más datos gracias a testimonios de vecinos. Relataron que la menor había sido vista el mismo día, acompañada por un hombre y una mujer, caminando sobre la calle Copihue con sentido hacia Voltaire. La investigación determinó que ese hombre habría sido su primo Carlos, de 22 años, mientras que la mujer era su novia. Ambos quedarían desvinculados de la causa por falta de pruebas.

Por otro lado, la Policía realizó un allanamiento en un domicilio de la calle Terrada al 2900. Se cree que Candela habría llegado a esta casa acompañada justamente por su primo. El lugar, presuntamente usado como búnker de drogas, era frecuentado por dos hermanos, quienes son señalados por la familia como los asesinos de la joven.

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