Nouvelle cumple 37 años: la panadería que hizo su clientela en plena estación

UN EMBLEMA EN LA ZONA. El comercio siempre estuvo en Fonrouge 83, a metros de las vías del tren. Supo ser un negocio al paso, pero con el tiempo cautivó el corazón de decenas de familias.

La panadería sigue en la misma locación desde que se fundó- se convirtió en un emblema de Lomas

La panadería sigue en la misma locación desde que se fundó: se convirtió en un emblema de Lomas.

La panadería y confitería Nouvelle cumplió esta semana sus primeros 37 años de vida. El comercio nació y creció a metros de la estación de Lomas, pasando de ser un local al paso a generar una clientela que atravesó a varias generaciones de familias. Paula González es hija de Raúl, uno de los fundadores de la panadería, quien dialogó con el Diario La Unión para contar la historia del negocio que se convirtió en un emblema del distrito.

La panadería y confitería Nouvelle se fundó gracias a la asociación de tres familias que se dedicaban al rubro como los González, Capielo y Mallía. "Mi papá, Raúl González, tenía otra panadería en Llavallol y quiso expandir el negocio: así fue como, después de una intensa búsqueda, logró dar con el local que se encuentra en Fonrouge 83, a metros de la estación de Lomas y donde actualmente sigue atendiendo a cientos de vecinos", detalló Paula.

Mi papá, Raúl González, tenía otra panadería en Llavallol y quiso expandir el negocio: así fue como, después de una intensa búsqueda, logró dar con el local que se encuentra en Fonrouge 83, a metros de la estación de Lomas y donde actualmente sigue atendiendo a cientos de vecinos

Aquel 9 de julio de 1988, día de la inauguración, Paula estuvo trabajando en la panadería, acompañando a su padre en la nueva aventura. Por eso, González también fue testigo y vivió en carne propia los distintos cambios que atravesó el comercio a lo largo de los años.

"Al principio, y debido a su ubicación, la panadería era un comercio de paso para los vecinos. Hoy podemos decir que contamos con muchísimos clientes que son habitué de todos los días: familias enteras nos han elegido, pasando hasta tres generaciones por este lugar", admitió la lomense.

Al principio, y debido a su ubicación, la panadería era un comercio de paso para los vecinos. Hoy podemos decir que contamos con muchísimos clientes que son habitué de todos los días: familias enteras nos han elegido, pasando hasta tres generaciones por este lugar

"Cumplir 37 años significa mucho, más en un país como Argentina. Es muy difícil para un comercio familiar sobrevivir a distintas crisis económicas y sociales, pero el buen nombre de la panadería, la calidad de la mercadería y la atención personalizada hizo que este espacio sea muy perdurable en el tiempo", finalizó Paula, con mucho orgullo.