Lomas: el crudo relato de la mujer que mató a su ex y fue sobreseída
LAURA HERRERA. La Justicia entendió que actuó en legítima defensa. Ella aseguró sufrir violencia de género y hostigamientos. "Yo sería incapaz de hacerle daño, sólo me defendí", declaró.
El sobreseimiento de Laura Herrera, la mujer que mató a su expareja en Villa Fiorito por defenderse de un ataque, marcó un antes y un después en la historia judicial. La Justicia de Lomas de Zamora tuvo en cuenta los tormentos que Laura describió con crudos detalles.
En el fallo final que sobreseyó a Herrera, aparecen fragmentos de su terrible testimonio. Varias líneas en las que la mujer relata la violencia física y psicológica que ejercía Sergio Pavón, el hombre que la atacó y que terminó asesinado tras ser apuñalado con un cuchillo de cocina.
"Empezamos a discutir, era muy celoso, se puso violento conmigo y me agarró del cuello, me tiraba del pelo. En un momento me tira a la cama y me arrojaba manotazos, como que me quería ahorcar", aseguraba Laura en su declaración, a la que pudo acceder La Unión.
Tras ese episodio, llegó el ataque de Pavón y la reacción de Laura, que terminó en asesinato. En palabras de la joven: "Empezamos a discutir otra vez. Estábamos en la cocina de él, al lado de la mesada parados. Él me ahorca, entonces yo me desesperé porque sentí que me estaba ahorcando. Él me tenía de atrás y manoteé lo primero que encontré. No sé, un cuchillo".
"Él me tenía ahorcándome con el antebrazo, apoyada contra la mesada cerca de la cocina. Agarro lo primero que encuentro en la mesada, yo manoteé sin mirar, tiré un puntazo hacia atrás y él me suelta y me dice 'me pinchaste'. Lo veo y estaba lleno de sangre. Sólo le di un puntazo. ( ) Cuando me dice así, yo le digo 'no te quise lastimar', y vi que tenía sangre en la pierna, mucha", prosiguió.
Lo que sigue es historia conocida: Sergio murió desangrado a causa de sus heridas. A pesar de la llegada de la Policía y la ambulancia, no pudieron salvarle la vida. "Yo sería incapaz de hacerle daño, yo sólo me defendí. Tengo un nenito con discapacidad y él depende de mí", sostuvo Laura sobre la muerte de Pavón.
Otro fragmento que tuvo en cuenta el juez, expresado también en el fallo, fue el testimonio de la denuncia radicada por Laura en la Comisaría de la Mujer de Temperley. "Yo sufría de violencia de género. Siempre delante de mi hijo me pisaba, me gritaba, me empujaba, me pegaba. ( ) Él siempre me decía que iba a cambiar. Cuando le hice la denuncia, le pedí que se fuera, que busque una casa y ahí es cuando se mudó", había declarado Herrera, según se lee en la sentencia.
"Él me seguía buscando que se hacia el bueno y yo le dejaba entrar. Cuando le decía que no, igual saltaba y se metía. Yo al dueño le propuse cambiar la puerta y poner rejas", añadió.
Por otro lado, el juez remarcó la declaración de una amiga de Laura, que señaló que "Sergio Pavón era una persona muy celosa" y que "ante un simple 'me gusta' que le dieran a Laura en una red social alcanzaba para que él se 'sacara' y se pusiera como loco, tornándose muy violento".
Por su parte, la cuñada de Herrera afirmó que había observado "a Laura marcada o herida, con moretones en brazos y heridas similares". Todos estos relatos contribuyeron al sobreseimiento. El juez Gabriel Vitale, del Juzgado de Garantías Nº8, interpretó que Laura no quiso matar a Sergio, sino que intentó defenderse de un ataque, en un contexto de violencia de género y hostigamientos a los que llevaba sometida desde mucho tiempo antes que el ataque.