Golpearon a un perro e intentaron ahogarlo en un arroyo: murió horas después

Golpearon, torturaron e intentaron ahogar en el Arroyo a un perro callejero en el barrio de Albertina: el animal agonizó durante horas hasta que murió esta mañana.

"Osito" era el nombre de un simpático perrito de cinco años que vivía en el barrio de Albertina y que tuvo la fortuna de cruzarse con solidarios vecinos que desde que era cachorro siempre se ocuparon de darle atención veterinaria, comida, agua, una cama y abrigo.

Particularmente, la familia de Gisel Acosta le había asignado su lugar en la vereda de la puerta de su casa, situada cerca de la avenida Martín Rodríguez y Falucho, donde habitualmente el animal siempre la esperaba tanto a ella como al resto de los integrantes de su familia. "Era muy cariñoso, por las mañanas cuando mi mamá acompañaba hasta la parada a mi hermana para ir a la facultad se despertaba para que ir con ellas", marcó en charla con La Unión.

Ayer por la tarde noche, en torno a las 20, cuando Gisel regresó a su casa notó que "Osito" estaba todo mojado y temblando en su cucha. "Lo primero que pienso es que alguien le había tirado agua pero cuando veo, le saco la ropita que nosotros le habíamos puesto y se sentía el olor al agua del Riachuelo. Era otro, estaba en un estado de shock, muy tenso. No podía caminar ni abrir los ojos, además no tenía ningún diente", describió.

Tras ver a su pequeño amigo de cuatro patas en ese estado, rápidamente lo entraron a su casa para bañarlo con agua caliente y secarlo. Luego, lo llevaron a un veterinario para que lo revise. "Estaba muy mal", aseguró, e indicó que el profesional le dio una inyección, pero no quiso apresurarse en dar un diagnóstico y recomendó esperar. Había sido víctima de una cruel golpiza.

El animal vomitó agua podrida en un principio y después ya sangre, síntoma de su grave estado de salud. Convulsionó varias veces durante toda la noche, siempre acompañado de la familia que desde sus primeros años de vida se ocuparon de darle lo que podían. Fue después de una larga y agónica jornada, que esta mañana, en torno a las 7.20 el animal murió. "Todavía no dormimos", confesó la joven de 26 años.

"No era un simple perro de la calle. Él significaba mucho para nosotros. Mas allá de que estaba sufriendo y de que no nos podía ver, se calmaba cuando nos escuchaba. Él sentía nuestras caricias", expresó conmovida, y apuntó que su muerte fue "injusta". "Ya no nos lo devuelve nadie. Para otras personas era un estorbo, pero para nosotros era nuestro compañero. Todavía no entiendo cómo cabe tanta maldad", afirmó. Aún no lograron establecer quiénes fueron los sujetos que le causaron la muerte a "Osito".

"Queremos visibilizar el caso de 'Osito" porque buscamos concientizar que hay muchos perros que están en situación de calle. Acá diariamente se ve que las personas abandonan mascotas viejas o enfermas. Los agarran cuando son cachorros y después terminan como él, en la calle, sin una manta, sin nada donde refugiarse, sin que lo quieran. Eso es lo que más duele", denunció, y enfatizó: "Los tiran al riachuelo y los abandonan sin que nadie les haga una caricia. Dejan sufriendo al perro, agonizando, hasta que se muera solo".

"Nosotros solo somos una familia, ni una asociación de rescate ni nada. Con lo poco que tenemos hacemos lo que podemos", subrayó acerca de su trabajo voluntario en el rescate de animales.

Actualmente, la mamá de "Osito" está bajo tránsito en Remedios de Escalada. La próxima semana prevén castrarla y luego buscarle un hogar definitivo. En este sentido, la familia pidió a quienes se interesen en adoptarla que se contacten con ellos al 11 3178-0528.

"Queremos buscarle un hogar a ella, para que no se vuelva a repetir la historia y después descansar un tiempo. Estamos muy tristes", concluyó.