"Donde hubo violación tras violación fue en el Pozo de Banfield"

Valeria del Mar Ramírez, la primera mujer trans que se presentó como querellante en un juicio de lesa humanidad, relató este martes las violaciones grupales y golpizas que padeció mientras estuvo 14 días detenida en el Pozo de Banfield durante la dictadura cívico-militar.

"En la dictadura los travestis y los homosexuales éramos como bichos raros y cómo un gobierno militar iba a permitir que estuviéramos en la vía pública. Donde hubo maltrato y violación tras violación fue en el Pozo de Banfield", señaló Ramírez, que a principios de 1977 fue llevada al centro clandestino junto con una compañera de nombre Romina.

"Nos agarran, nos meten en un Ford Falcon y arrodillan entremedio de las piernas de ellos (los policías) con la cabeza para abajo. Cuando llegamos, los policías dijeron: 'aquí tienen las cachorras que habían pedido'", recordó y detalló que las metieron en calabozos individuales mirando para abajo con el objetivo de que no vean que había otras personas detenidas. 

"Un día cuando me sacaron a bañar llené una botella de agua y cuando me decían de hacerles sexo oral a cambio de comida yo no comía. Estuve dos días sin comer tomando solo agua hasta que abrieron el calabozo, encontraron la botella, la tiraron y tuve que acceder a la violación. Me violaron los cuatro", contó conmovida.

En otra oportunidad hubo tres policías que la violaron y otros que la golpeaban porque no quiso tener sexo con ellos. "Yo ya no sabía qué hacer, prefería que Dios me lleve y pensaba que era el fin de mi vida. Me parecía que estaba con gente demente porque para que quieran hacer esas cosas no veía la razón", remarcó. 

En 2012, Valeria del Mar recibió de la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner el documento con su identidad autopercibida. Durante la audiencia de este martes también declararon Eduardo Castellano, sobreviviente del Pozo de Banfield y El Infierno; y Boris Santos, delegado de Peugeot, sobreviviente del Pozo de Quilmes.