Federico Crivelli reveló cuál es el partido que marcó su carrera

Federico Crivelli le dijo adiós al fútbol en la anteúltima fecha de la Primera Nacional, cuando Temperley recibió a Agropecuario en el Alfredo Beranger, con su gente, como él lo había soñado. 

En el Celeste, el ahora ex arquero atajó 317 partidos, logró dos ascensos, convirtió tres goles (todos de penal) y a su vez ostenta el récord de mayor cantidad de penales atajados, a la vez que posee el segundo mayor registro de imbatibilidad, al lograr mantener la valla invicta durante 583 minutos en el año 2013. 

Sobre ese último partido ante Agropecuario, Crivelli expresó: "Fue un momento de mucha emoción, desde el día que anuncié mi retiro. Comenzaron a llegar mensajes de cariño a partir de ahí". 

En cuanto al momento en el que decidió ponerle fin a su carrera, el emblemático arquero puso énfasis en su familia. "La decisión no la tomás de un día para el otro. Es un proceso que lo venís evaluando durante meses o años. Yo, por ahí, hace un año lo analizaba, pero había terminado bien, quería jugar. Este año no tuve la continuidad deseada y eso en la cabeza influye mucho. Pedí jugar con Agropecuario, con la gente que siempre me alentó", comentó. 

La carrera de Federico Crivelli tiene muchos momentos especiales, pero hay algunos que se le vienen a la mente inmediatamente al momento de tener que elegir qué partidos marcaron su carrera. 

"Es algo imborrable la final con Platense, donde pude atajar dos penales y convertir el que me tocó patear, con el cual se logró el ascenso a la B Nacional, en el 2014. También fue importante para mí el partido con Banfield en Primera", confesó. 

EN QUÉ ROL SE VE FEDERICO CRIVELLI EN EL POST FÚTBOL

Ante la consulta de La Unión sobre si ya se imagina en el corto plazo dirigiendo a algún equipo, se mostró cauto. "Me faltan un par de materias para terminar el curso de técnico. Me apasiona todo lo que tenga que ver con el fútbol, la adrenalina, competir, jugar y ganar", reconoció. 

"También me gustaría ocupar otro rol dentro de la variedad que hay en el fútbol. Si mañana tuviera que dirigir a un equipo, mi dibujo táctico sería el 4-4-2, ya que ésta es la fórmula que más cómodo me hizo sentir en mi carrera, pero eso no quita que podría adaptarme a otros esquemas de acuerdo con la característica de los jugadores", explicó Crivelli.