Son internas del Esteves y atienden el nuevo bar: "Nos sentimos útiles"

Ahora sí, es una realidad. El bar cooperativo "Cruz del Sur" del Hospital Interzonal Esteves tuvo su inauguración oficial el pasado martes, donde asistieron más de 100 personas, y las encargadas de atenderlo, algunas mujeres alojadas en la institución y una ya insertada en la sociedad, contaron sus sensaciones ante semejante logro, la relación entre ellas y sus tareas, la responsabilidad que conlleva un trabajo y la felicidad de "sentirse útiles e incluidas en un proyecto que, ojalá, dure muchos años".

Norma Cardozo, Andrea Azagra, Patricia Barreiro, Máxima Benítez y Deisy Mendoza. Ellas cinco son las protagonistas de la historia y las responsables de que el bar funcione correctamente, de lunes a viernes de 8 a 13 (por el momento).

Norma Cardozo hace cuatro años que está insertada nuevamente en la sociedad, aunque sigue en contacto con el Hospital para consultas y seguimientos. Así fue que se enteró del proyecto del bar y, sin dudarlo, se puso a disposición para ser parte. "Mucho tiempo atrás trabajé como bachera en varios lugares y siempre me gustó el rubro, así que ése es mi trabajo acá en el bar. Con mis compañeras nos llevamos muy bien", contó.

"Yo estoy encargada de amasar y hacer las pizzas", sentenció Deisy, mientras que Andrea se sumó y explicó que su rol es preparar el café, el té, los exprimidos y los licuados. "Nosotras dos somos las que atendemos a los clientes", dijeron al mismo tiempo Patricia y Máxima, tan coordinado que en sus palabras demostraron el equipo que forman en esa tarea fundamental.

El bar "Cruz del Sur" fue inaugurado de manera oficial del martes pasado, en donde estuvieron presentes autoridades del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, el secretario de Salud de Lomas, Mariano Ortega Soler, y la subsecretaria de Salud de Lomas, Sonia Nanni, entre otros funcionarios, integrantes del Hospital Esteves y representantes de la Universidad Nacional Arturo Jauretche. "Estaba lleno de gente, tuvimos mucho trabajo con la entrega de copetines, budines, empanadas, pizzas y tortas", contaron.

Ver a tanta gente fue una satisfacción muy grande, nos sentimos importantes.

"Ver a tanta gente fue una satisfacción muy grande, nos sentimos importantes", dijo Máxima, mientras que Norma agregó que, para su punto de vista como una persona que ya está insertada en la sociedad, este paso "es muy importante porque mucha gente piensa que porque una mujer está alojada en un hospital neuropsiquiátrico está loca y no tiene oportunidades, ese prejuicio hay que cambiarlo de inmediato porque las chicas también tienen el derecho a un trabajo digno, a la inclusión".

Andrea interrumpió la charla y le contó al Diario La Unión que fue ella quien le puso el nombre al bar: "Se me ocurrió Cruz del Sur porque es una constelación a la vista de todos, nos ilumina y nos guía".

Este paso es muy importante porque mucha gente piensa que porque una mujer está alojada en un hospital neuropsiquiátrico está loca y no tiene oportunidades, ese prejuicio hay que cambiarlo de inmediato porque las chicas también tienen el derecho a un trabajo digno, a la inclusión.

Al ser consultadas sobre lo más pedido, Patricia no dudó y dijo que el combo del café con el alfajor de maicena y coco es furor, mientras sus compañeras asintieron con la cabeza.

Todo el trabajo que realizan las chicas en el bar, sumado a la elaboración de los productos para vender (también llevado adelante por otras ocho mujeres alojadas en el hospital) es acompañado y supervisado por las enfermeras Sandra Marano y Silvia Medina, además de la colaboración de las psicólogas Nadia Percovich y Natalia Osella.

"Con la nueva dirección de María Rosa Riva Roure se propuso un cambio para combatir la salud mental: creemos que el mejor camino es la inserción y no el encierro. Gracias a ese trabajo de transformación hospitalaria se fueron cerrando salas de mujeres alojadas y ahí me propusieron trabajar en el bar", contó Marano, con una experiencia de 26 años en el Esteves, muy feliz por el progreso mutuo, tanto de las chicas como de ella misma en ese nuevo rol, ya que este proyecto es una herramienta para las mujeres alojadas.

Las chicas dijeron que les gustaría que el bar expanda su horario de atención: su intención es que, desde abril, el horario sea de 8 a 17, una decisión que salió de ellas mismas. Para finalizar, contaron que "ojalá 'Cruz del Sur' dure muchos años más porque va a ser una linda forma de que muchas de nosotras podamos progresar, además de que sea abierto totalmente a la comunidad".