Miércoles negro: el riesgo país y el dólar volvieron a dispararse ante la incertidumbre política
NACIONALES. Los inversores desconfían de la capacidad del Gobierno para controlar la crisis y desconfían sobre lo que sucederá en Argentina a futuro.
El riesgo país y el dólar volvieron a dispararse por las nubes ante la desconfianza de los mercados en la capacidad del Gobierno para controlar la crisis y la incertidumbre que existe sobre el futuro político de la Argentina en medio de un año electoral.
La corrida que empujó al dólar al filo de los $45 en los bancos, $1,39 más que el cierre del martes, estuvo vinculada con la búsqueda de refugio de los inversores, el desarme de posiciones en activos argentinos y el impacto de la devaluación de los países emergentes.
“Estamos en un círculo vicioso”, resumió director del estudio Eco Go, Federico Furiase. El problema se evidenció ayer con la suba del riesgo país, que tocó los 963 puntos, el nivel más alto en la era Macri y el desplome de las acciones locales en Wall Street.
El Banco Central para intentar contener la situación volvió a apelar a una nueva suba de tasas (que alcanzó el 68,33%) y la venta de U$S60 millones del FMI.
El panorama para Claudio García, de Oubiña Cambios, es más que negativo: “No nos cierran los números por ningún lado, volvieron a tocar la tasa pero no pasa nada. Estamos en una trampa con todos nosotros adentro y lo peor es que cada vez se pone peor”.
La tormenta financiera podría desencadenar un combo similar al que se vivió del año pasado: aumento de la inflación, espiral devaluatorio, caída de la economía, ajuste monetario y una nueva complicación en la sostenibilidad de la deuda que está en dólares.
La única reacción del Gobierno ante este escenario fue depositar las culpas fuera de la Casa Rosada. El presidente Mauricio Macri, desde Santa Fe, sostuvo ayer que el riesgo país debido a que el mundo “tiene miedo” porque “cree que los argentinos por ahí quieren volver atrás” pero aseguró que “esas dudas están infundadas”.
Lo cierto es que el Poder Ejecutivo, al menos hasta ahora, no encuentra soluciones para desactivar la bomba que generó a partir de la puesta en marcha del modelo Cambiemos.
(noticia en desarro