Una vecina de Fiorito logró fundar con esfuerzo el comedor Los Pekes
para ayudar al barrio .
Rosy Cejas abre todos los días su propia casa para brindar el almuerzo a alrededor de 90 chicos que a veces “llegan sin zapatillas”. Pide la colaboración de los vecinos para seguir adelante.
El esfuerzo para ayudar a los que más lo necesitan es parte de la vida cotidiana de Rosy Cejas (43) de Fiorito, quien hace casi un año abrió las puertas de su casa, de su propio comedor, para crear Los Pekes, un espacio solidario donde alrededor de 90 chicos -algunos de ellos llegan descalzos- asisten de lunes a viernes para recibir el almuerzo y la cena.
“Se hace difícil, no lo voy a negar, pero gracias a la colaboración de muchos de los vecinos, este comedor sigue en pie, aunque siempre necesitamos ayuda porque las carencias son muchas en el barrio”, contó Rosy, quien decidió llevar adelante este proyecto -que el 24 de este mes cumple su primer año- cuando tuvo un problema de salud que casi pierde la vida.
“Necesitaba hacer algo para la gente del barrio, y tener mi propio comedor siempre era una de mis asignaturas pendientes”, cuenta la vecina que pone su propio comedor familiar para poder hacer esta labor solidaria.
También Rosy decidió incorporar clases de hóckey para fomentar el deporte: “Tuve una propuesta de un profe que me lo sugirió y gracias a ello comenzamos con el proyecto en un playón nuevo que hay en el barrio, donde los chicos entrenan gratis y luego ser parte de un torneo local en el que participan 35 chicos”.
Con cuatro hijos que la apoyan y ayudan con el comedor, Rosy puede mantener el espacio que abre de lunes a viernes para brindar el almuerzo y además los lunes, miércoles y viernes de 20 a 21.30 sirven la cena.
“Para nuestro primer aniversario estamos preparando un festival en el que van a colaborar como siempre los vecinos. Algunos van a venir a cantar, a hacer algún show gratuito para los chicos. Nos gustaría que nos donen una torta”, pidió.
Actualmente, lo que más necesita Los Pekes son mesas y sillas para que los chicos estén cómodos porque a veces no entran todos; y también zapatillas porque algunos “llegan descalzos”, dijo la vecina solidaria. Alimentos no perecedero y carne o pollo pueden ser de gran ayuda porque deben preparar el plato de comida todos los días.
Para colaborar dirigirse al espacio ubicado en Esquel sin número entre Milán y Filardi, del Barrio 8 de Diciembre de Fiorito o enviar un mensaje a través de WhatsApp al 11 6048-5