Murió la mujer que había sido baleada por su esposo en medio de un asalto en Glew
ALMIRANTE BROWN. Se trata de Raquel Arbona, que desde el viernes pasado estaba internada en el Hospital Lucio Meléndez de Adrogué en estado crítico.
Después de luchar por su vida durante cinco días, murió Raquel Arbona, la mujer que recibió un disparo en la cara en medio de un forcejeo que su marido protagonizó con un grupo de delincuentes que habían entrado a robar a su casa en la localidad de Glew.
Arbona estaba internada en el Hospital Lucio Meléndez de Adrogué con un cuadro delicado. Había ingresado el viernes a la madrugada con una herida de bala en la cabeza y había sido operada. A pesar del esfuerzo que hicieron los médicos, su cuerpo no aguantó más.
La noticia la confirmaron a La Unión allegados a la familia y fuentes policiales. Raquel era suboficial principal del Servicio Penitenciario Bonaerense. Estaba asignada a la Subdirección de Operaciones y trabajaba como auxiliar en la Alcaidía Departamental de Avellaneda.
"Era excelente, buena persona, alegre, feliz, amaba a sus sobrinos, ella podía en un segundo hacerte explotar de risa", la recordó Claudia, una de sus amigas de su infancia.
El viernes, ladrones armados entraron a su casa. Raquel y su esposo, Gustavo Eduardo Obregón, dormían. Cuando escucharon los ruidos se despertaron. En ese momento, uno de los delincuentes estaba adentro de su habitación. Portaba un arma blanca.
Inmediatamente Obregón, empleado de una empresa de transporte de caudales, tomó su pistola 9 milímetros para defenderse, hubo un forcejeo y siete disparos. Uno de ellos impactó a Raquel en el rostro, otro hirió al ladrón.
Los asaltantes, tras el hecho, saltaron por el balcón y escaparon en distintas direcciones. Tres corrieron hacia un Ford Focus blanco que los esperaba en una esquina, según pudieron ver los investigadores en los videos de las cámaras de seguridad de un negocio.
https://youtu.be/JzA5ASVOERs
Buscando en centros de salud de la zona, la Policía detectó que en la Unidad de Pronta Atención (UPA) de Glew habían ingresado tres jóvenes, uno de los cuales estaba baleado y murió en el lugar. Se sospecha que el joven muerto fue el que hirió Obregón en su casa.
La policía detuvo en las inmediaciones a otros dos sospechosos que lo acompañaban, Roberto Daniel Chayan y Brian Humberto Chávez. Horas después cayó Alfredo Saporeti, el conductor del Focus blanco, cuando llevaba a la madre del ladrón fallecido a la UPA.
Según fuentes policiales, Saporeti se quebró ante los policías y confesó que había trasladado a la banda al lugar del robo, y que después de dejar a González en Longchamps, también llevó a otro herido al hospital Balestrini de La Matanza.
Todos quedaron imputados por el delito de "robo agravado por el uso de arma de fuego, por escalamiento y por ser en poblado y en banda”. Los tres primeros como coautores y el remisero como partícipe.
El fiscal Silvestrini también avanzó en la causa paralela que inició para investigar la muerte de uno de los delincuentes, Luis Ángel González (20), y ahora por la de Arbona.
Por el momento, el titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 11 ya determinó que el marido de la mujer actuó en “legítima defensa” al disparar su pistola contra los delincuentes, si bien aún restan peritajes, todo indica que el balazo que la penitenciaria recibió en la cara fue producto de un reb