Lanús sigue al Rojo vivo y sueña despierto en la Copa Argentina

Lanús está en un gran momento, no para de hilvanar buenos resultados, y ayer lo ratificó con otro resultado valioso por la Copa Argentina: le ganó por 2-0 a Independiente y se metió dentro de los cuatro mejores de la edición 2019.

De esta manera, con goles de Sand y Abecasis, el Granate se sacó de encima un duro escollo, el más difícil en este camino, e igualó lo hecho en 2015 cuando también había alcanzado las semifinales.

El Granate no jugó bien, pero fue contundente y golpeó en los momentos justos, sacándole todo el provecho a los fallos de un Independiente que, si bien se mostró mejor en el trato de la pelota, desperdició varias situaciones de peligro.

El equipo de Zubeldía destrabó el trámite en un momento ideal, a segundo de la finalización del primer tiempo,  luego de 45 minutos en los que le costó hacer pie y era superado por el rival, que complicaba por la derecha y tenía el control del juego.

En ese momento, justamente, apareció José Sand, el hombre de los 122 goles, y no perdonó: Pepe aprovechó el mal control de Franco tras un pelotazo de Valenti y, tirándole toda su experiencia, le ganó la posición y definió bien a la red.

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Esa ventaja, sin embargo, no la pudo consolidar en el juego. Se retrasó, esperó muy atrás y  buscó salir rápido de contra, pero no estuvo fino y sufrió hasta el final, siendo superado  por el elenco de Beccacece.

Y es que el de Avellaneda, con el dominio del balón, lastimó mucho por las bandas, con pelotas cruzadas y sacándole provecho a las dudas de Di Plácido. Y por esa vía, mereció el empate. Lo tuvo con un cabezazo defectuoso de Silva, con un frentazo alto de Sánchez Miño dentro del área y, en la más clara, Rossi se lució al ahogarle el gol al colombiano Roa.

El Rojo falló. Y Lanús no lo perdonó. Sobre el final, le puso el moño a un gran triunfo gracias a un gol de Abecasis, que cerró el pase a las semifinales, donde se medirá con Central Córdoba.

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