Boca arrancó bien pero luego vivió una pesadilla
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El Xeneize metió un gol al minuto, aunque después se desdibujó, sufrió dos tarjetas rojas y una lluvia de goles.
Cuando parecía que la mano cambiaba para Boca, en un abrir y cerrar de ojos todo se esfumó.
En Mar del Plata, en menos de un minuto arrancó ganándole a Racing con un gol de Calleri, ante el quedo de la defensa de los de Avellaneda.
Pero, lejos de aprovechar la ventaja en el resultado, Racing le empató rápido por intermedio de Bou gracias a un error de los centrales e inmediatamente Milito puso el 2-1.
En ese momento se le vino el mundo abajo al Xeneize. Es que entre el minuto 22, con el segundo gol de la Academia, y el 28, con la segunda expulsión, el partido se desvirtuó.
120 segundos después de que Milito diera vuelta el resultado, Erbes pegó un codazo y se fue a las duchas antes de tiempo.
Y cuatro minutos más tarde, Marín le pegó una patada criminal a Centurión y también fue expulsado.
Boca quedó diezmado y sin ideas, sobre todo cuando Arruabarrena sacó a Pavón, el más claro del Xeneize.
A un minuto del final del primer tiempo, Bou marcó el tercero y terminó el partido.
En la segunda parte, Boca intentó mantener el orden y Racing monopolizó la pelota.
Con una gran jugada colectiva, Racing se floreó y coronó la noche anotando el cuarto, otra vez gracias a