La línea C tuvo sus molinetes liberados durante seis horas por un reclamo gremial

La medida se extendió entre las 5 y as 11 hs y no afectó el servicio. Los delegados no descartaron paralizar mañana alguna de las seis líneas.

Los trabajadores de la línea C de subte liberaron desde las 5 hasta pasadas las 11 los molinetes en la estación Constitución en protesta contra “la pérdida de 350 puestos de trabajo” que se vería agravado, entre otras cuestiones, por la instalación de terminales automáticas para la recarga de la tarjeta SUBE, aunque Metrovías negó que se pierdan empleos.

“El punto fundamental de la protesta es que en el acta 2013 ellos (Metrovías, Sbase y el gobierno de la Ciudad) se comprometieron se iban a mantener los planteles de boletería, los auxiliares y el de peón general, pero hoy vemos que hay un vaciamiento de estos sectores”, explicó a Télam el metrodelegado Nestor Piriz.

“Son 350 los puestos de trabajo que se perdieron porque en la escala de ascensos, los lugares que fueron dejando vacantes, no fueron cubiertos. Hay una gran preocupación, dado el contexto de ajuste en el sector privado y estatal, con despidos, suspensiones y tarifazos”, dijo.

Piriz explicó que por la instalación de terminales automáticas de recarga de la tarjeta SUBE “el puesto de boletería es el más perjudicado”.

“Nosotros no estamos en contra de las tecnología, que sabemos tarde o temprano va a llegar y ya se está implementando en las líneas H, B y D; pero pedimos que respeten lo firmado, en el sentido de que nos se iban a caer puestos de trabajo, porque faltan entre 50 y 70 boleteros, 70 peones de limpieza y 210 auxiliares”, dijo.

Los metrodelegados también reclaman el blindado de las boleterías y la modernización de los postnet de carga.

“En esa misma acta ellos se comprometieron al blindaje de las boleterías en un plazo de 18 a 20 meses, pero hasta el momento blindaron sólo 36 de 126”, contó.

Sobre los postnet, Piriz afirmó que “son obsoletos, porque tiene entre 15 y 20 años”.

Por su parte, Metrovías indicó que la medida que realizó la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP) es "absolutamente injustificada" y "tiene su origen en un conflicto de carácter interno en el gremio con motivo del rechazo a la instalación de terminales de recarga en el subte".

"Este proyecto, que ya se encuentra en implementación, fue aceptado y ratificado tanto por el sindicato Unión Tranviarios Automotor (UTA) como AGTSyP en un acta firmada el 18 de abril en la Subsecretaría de Trabajo de la Ciudad de Buenos Aires", añadió la empresa en un comunicado.

"Las máquinas son una mejora para el servicio y permitirán a los usuarios cargar crédito en la tarjeta SUBE de un modo ágil, evitando de esta manera esperas innecesarias", justificó y argumentó que no eliminarán puestos de trabajo por la incorporación de las terminales.

"Se potenciará el desarrollo de carrera del personal de la compañía, ya que habrá empleados que pasarán a desempeñarse en puestos de mayor jerarquía, con el incremento de la remuneración correspondiente", concluyó Metrov�