Clase de teatro abierta y gratuita en Temperley
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En el Galpón de Diablomundo se repite esta experiencia a cargo de Quique Pagella y Leila Kancepolsky para iniciados y los que buscan nuevos horizontes.
Continuando una modalidad de los últimos años, mañana en el Teatro del Galpón de Diablomundo de Temperley se dictará una clase abierta y gratuita de teatro a cargo de Quique Pagella y Leila Kancepolsky para quienes quieren dar sus primeros pasos en las artes y también para aquellos quieren ampliar sus horizontes.
“Todos los años en febrero hacemos clases abiertas y gratuitas para los interesados en los talleres de teatro, es para darnos la oportunidad de conocernos. Hay mucha gente que no está informada. Les sirve a los interesados para conocer de qué forma trabajamos”, comenta Quique Pagella, uno de los docentes, sobre la utilidad que tiene la experiencia para los futuros alumnos y para los responsables del espacio.
Para Quique Pagella, este tipo de clases también tienen una utilidad para los potenciales alumnos para conocer qué tipo de abordaje teatral tendrán durante el año. “Nos parece lo mejor hacer estas clases. Hay distintos tipos de teatro, como el teatro de texto y el teatro de movimiento. Nosotros nos enrolamos en esta última escuela, que no es sólo de texto; por eso esta clase es para principiantes y para los que buscan otra alternativa”, acota.
El docente traza un interesante paralelo entre la ejecución de un instrumento y la utilización del cuerpo en el escenario. “El pianista ejecuta un instrumento, mientras que el actor ejecuta un instrumento que es su propio cuerpo, ¡vaya instrumento que le toca ejecutar! Nosotros queremos poner el cuerpo en acción”, señala.
EL TEATRO, OTRO IMAGINARIO. “Hay muchos alumnos que vienen con un imaginario muy fuerte de la televisión y el cine y yo creo que el teatro es más difícil. En la pantalla, el director decide los planos y se pueden repetir las tomas, mientras que en el teatro tenés al espectador a cinco metros mirándote de pies a cabeza, y el actor es el que tiene que decidir qué plano tiene que tomar el público, si es un primer plano o un plano detalle, por ejemplo. Si es el espectador el que decide con qué plano tomarte, se aburre y se va”, explica Pagella sobre estos mundos distintos en los que se despliega el oficio del actor.
Para ambos docentes, la modalidad de trabajo es partir de una clase planificada que luego va tomando otros rumbos a partir del grupo, en una forma de “customizar la cosa”, o de personalizarla, según los alumnos. Esta experiencia es para mayores de 18 años y se les sugiere que concurran a clase con ropa deportiva o cóm