Alertan que en pocos años colapsará el sistema de rellenos sanitarios

En tan sólo cinco años el sistema tradicional de los rellenos sanitarios colapsará. Los especialistas alertan sobre el aumento del enterramiento de los residuos y analizan una salida para este problema.

El sistema de rellenos sanitarios para deshacerse de la basura doméstica está llegando a su fin. Desde la Coordinación Ecológica Metropolitana Sociedad del Estado (Ceamse) anunciaron que hace 15 días comenzó a funcionar el último módulo del relleno sanitario Norte III, en el partido bonaerense de San Miguel. En este sentido, alertan que la situación actual tendrá su colapso en unos cinco años.

El problema radica una vez acabado ese plazo, cuando los 42 municipios del AMBA y la Ciudad buscar otros espacios para su basura o un nuevo tratamiento para su eliminación o reciclado. A pesar de que las autoridades no desean hablar de la incineración por la oposición de los ambientalistas, entre los planes oficiales aparece esta tecnología como una de las posibilidades para disminuir la cantidad de desechos.

"Hoy estamos enterrando 18.000 toneladas por día pero no podemos simplemente gestionar el día a día. Tenemos que tener una mirada de mediano y de largo plazo. En un trabajo que hicimos con la Facultad de Ingeniería de la UBA donde estimamos el crecimiento poblacional, de los residuos y el económico se proyectó que, por día, se pasará a disponer al 2030 unas 25.000 toneladas por día", explicó Gustavo Coria, presidente de Ceamse .

El principal productor de residuos es Capital federal, que el año pasado envió más de 1 millón de toneladas de desechos al relleno. Lo siguen La Matanza con 584.283 toneladas, Lanús con  319.803 toneladas y Lomas de Zamora con un total de 319.655 toneladas.

"El camino es tratar residuos y recuperar lo más que se pueda, en el medio hay miles de alternativas y tecnologías. Hoy tenemos que plantear que estamos ante un verdadero problema y que si no lo afrontamos va a ser inabordable", explicó el especialista.

En este panorama, la incineración de basura no se presenta como una opción viable ya que es una fuente de emisión de una gran cantidad de compuestos tóxicos para la salud, incluyendo varias sustancias cancerígenas como las dioxinas y los furanos. "Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 2 millones de personas mueren al año en el mundo por la inhalación de partículas en suspensión. Sumar contaminación aérea a ciudades ya saturadas de contaminantes, como Buenos Aires y ciudades del conurbano bonaerense, implica una baja en los índices de calidad del aire", explicó Nápoli.

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