Regreso con sinsabores para Zaragoza
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El lateral de Brown de Adrogué volvió a jugar después de dos operaciones de meniscos. Se mostró feliz por eso, pero triste por el resultado adverso ante Gimnasia de Jujuy.
Después de pasar dos veces por el quirófano por una rotura de meniscos, el lateral de Brown de Adrogué, Leonardo Zaragoza, volvió a un campo de juego e ingresó en la derrota ante Gimnasia de Jujuy a los 23 minutos del segundo tiempo en reemplazo de Martín Fabro.
“Me sentí bien y cómodo. La verdad que extrañaba volver a jugar después de siete u ocho meses. Hubiese sido lindo volver y ganar. Por un lado feliz y por el otro triste por la derrota”, explicó sobre su regreso y el trámite del partido.
“Todos los partidos son finales, porque tenemos que sumar para el Reducido".
Para sorpresa de muchos, el ex Estudiantes de Buenos Aires ingresó como volante izquierdo, cuando su puesto natural es el derecho. “Uno se tiene que acostumbrar a dónde lo ubique el técnico y tratar de hacer lo mejor posible en la posición que toque”, destacó.
El Lobo, que llegó a los 13 partidos sin derrotas y 784 minutos con valla invicta, fue un duro contrincante en Adrogué. “Se nos hizo difícil encontrarle la vuelta al planteo del rival. Gimnasia tiene un muy buen equipo, pero Brown tampoco hizo un buen partido. Sabíamos que venían muy bien, pero acá estábamos fuerte de local y es una lástima que no hayamos conseguido el triunfo”.
Y agregó: “Nos sorprendió el primer gol, fue muy temprano. Después es difícil remontarlo, Más en una cancha chica en donde todo cuesta y el rival se mete atrás”.
La próxima parada, será Los Andes: “Todos los partidos son finales, porque tenemos que sumar para el Reducido. Hay que estar tranquilos, pensar en el próximo rival y estar muy fuertes. Ahora hay que dar vuelta la página, trabajar en la semana y preparar el partido que viene, que hay que ganarlo”.
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