“Este equipo tiene la misma mirada de tigre que el del 2000”

Gabriel Lobos, integrante de aquel plantel que ascendió a Primera hace 18 años y hoy es técnico de Los Andes, ve similitudes entre los dos y se ilusiona a lo grande. “Esperemos que éste sea el año”, remarcó.

En la historia de Los Andes, hay un plantel que marcó a fuego a muchas generaciones de hinchas y que hoy, 18 años después, sigue en la memoria colectiva de todos: el que ascendió a Primera en el 2000. Y ese equipo, que rompió la lógica y consiguió un logro por fuera de cualquier pronóstico, está más latente que nunca.

Los años pasaron y los recuerdos de ese plantel humilde, que de la adversidad sacó lo mejor de cada uno y escribió uno de los capítulos gloriosos de la institución, aparecen como un faro para guiar a las nuevas generaciones. Y ahí, en esa función, está Gabriel Lobos, el aguerrido marcador central de aquel equipo de Jorge Ginarte y que hoy  es uno de los entrenadores del Milrayitas –junto a Luis Pérez, otro de los héroes del 2000-, con la premisa de “trasladar esa mística” al actual plantel.

“Ese equipo tenía hambre de gloria y estaba formado con apellidos que no eran rutilantes para la división. Muchos llegaron tras quedar libres y con un mal año a cuesta. Por eso, todos teníamos sed de revancha y por suerte salió bárbaro. Hoy veo lo mismo, veo esa misma mirada de tigre que no le puede faltar a un futbolista, y la verdad es que estoy muy conforme”, remarcó Lobos a La Unión.

Las similitudes aparecen rápido y ambos tienen cosas en común. Como aquel, el actual también está formado con jugadores que quieren hacer historia y dejar atrás la temporada pasada. Y eso, para el DT, es un aspecto muy positivo.

“Ahora tampoco hay nombres rutilantes. Hay futbolistas que vienen, en algunos casos, con sed de revancha, y en otros, con hambre de gloria. Y eso es muy importante. Hay cosas que los grandes nombres no te dan y que los jugadores con hambre y ganas lo suplen tranquilamente. Esperemos que éste sea el año, es lo que queremos todos”, continuó, con algo de nostalgia e ilusionado en repetir la historia.

Y cerró: “Esto me hace recordar mucho a esa época porque lo veo en los jugadores, con las ganas que llegan, cómo entrenan y eso ilusiona”.

LOBOS, CONFORME CON EL PLANTEL. El director técnico  también habló de la conformación del actual plantel y se mostró conforme con los jugadores que llegaron a Los Andes, aunque aclaró que “aún falta que las piezas se ensamblen en el campo de juego” para llegar en óptimas condiciones al debut del torneo. Tenemos que tener más dinámica y mayor velocidad en algunos movimientos, pero esto es normal por la etapa de trabajo”, remarcó.

A su vez, el entrenador resaltó la preparación y señaló que van “de menor a mayor” y confía en llegar “muy bien” al primer partido.

“Es un plantel muy competitivo entre ellos, con dos jugadores por puestos y que cualquiera puede jugar. Y eso, dentro de una lucha sana, potencia. Es lo que buscamos y afortunadamente lo estamos consiguiendo. Están todos parejos”, cerró.

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