Brítez Ojeda: “Hay que trabajar el partido y golpear en el momento justo”
de cara al duelo con el Gasolero, en Lomas. El volante de Los Andes sabe a la perfección lo que es el Clásico del Sur y fue claro para analizar el duelo con Temperley. ?Debemos jugarlo sin volvernos locos?, remarcó.
El Clásico del Sur se acerca. Sólo se habla de eso por las calles del barrio. Y Marcos Brítez Ojeda lo tiene en claro. Sabe de qué se tratan esta clase partidos, ya tiene sobre su lomo varios Los Andes-Temperley, y por eso vive esta semana de manera especial. Enfocado en lo que será el partido y sin que lo externo los desvíe del camino.
“Hay que golpear en los momentos justos”, avisó, con una idea clara, el mediocampista del Milrayitas. “Estos partidos el hincha los quiere ganar desde el primer minuto, pero nosotros tenemos que mantener la tranquilidad y no volvernos locos. Hay que trabajar bien el encuentro y golpear en los momentos justos. Por eso, hay que tomar muchos recaudos”, afirmó en charla con La Unión.
Brítez Ojeda jugó su primer clásico en el 2004 (triunfo por 2-1 del Milrayitas) y es el que más conoce de esto de los 22 que entrarán al campo. Y por eso sabe cómo hay que manejarse en la cancha. “Uno le agarra un sabor espacial porque estoy en el club desde los 11 años (hoy tiene 32) y sé que es el rival del barrio, el clásico, pero eso queda en la intimidad. En el campo de juego, hay que hacer bien las cosas para poder sumar los tres puntos”, señaló.
En esa línea, y ya enfocado en cómo será el trámite, señaló que será un partido “trabado”, ya que enfrente estará “un duro rival”, con futbolistas de “primera división”, y que irá al Gallardón con la idea de “llevarse algo” de Lomas. “Ellos vendrán a no perder, harán su juego, y nosotros también necesitamos sumar. Por eso, hay que ser inteligentes y hacer lo que hicimos en los últimos partidos (sumó nueve de los últimos 15 puntos)”, dijo.
Brítez Ojeda, por último, analizó la remontada que tuvo el Milrayitas y afirmó que los últimos dos triunfos (ante Santamarina e Instituto) los ayudó a “liberar la cabeza” y agarrar “confianza” para la recta final. “Ahora nos animamos hacer cosas que antes dudábamos y eso es importante”, recalcó.
“Estamos por el buen camino, pero tenemos que seguir mejorando porque todavía no hemos logrado nada. El esfuerzo tiene que ser doble”, cer