Animarse a más Ayelén Quiroga creo su propio emprendimiento para hacer lo que la apasiona y también poder pasar más tiempo con su hija.
Aunque no fue nada fácil tomar la decisión de dejar un trabajo estable para emprender, la lomense Ayelén Quiroga (28) se la jugó porque aseguró que encontró en la pastelería lo que realmente la hace feliz. Por eso, arriesgó y hoy se dedica de lleno a vender tortas artesanales y todo tipo de delicias a través de su cuenta de Instagram: @mitortabella
Desde muy chica que el mundo de la pastelería la acompaña, desde que veía a su abuela que cocinaba para vender, ella sabía que su pasión estaba por ese mismo camino, pero primero lo tomó sólo como un hobby.
"Antes de terminar el secundario me anoté en una escuela de cocina muy reconocida donde aprendí de todo, fueron dos años intensos y lo primero que hice es vender a los conocidos, familia, amigos y era esa que hacía la torta para todos los cumples", contó Ayelen que vive en Parque Barón y es mamá de una beba de 2 años.
Si bien siempre trabajó en distintos lugares, el tema de la pastelería siempre estuvo allí ocupando un lugar secundario. "Comencé a vender, pero en los tiempos que me quedaban libres y con pedidos con mucha anticipación", reconoció.
Pero cuando Ayelén quedó embarazada supo que tenía que tomar esa decisión que venía posponiendo: dedicarse de lleno a su oficio. "Tenía muy en claro que quería tener más tiempo para criar yo misma a mi hija y emprender te permite manejar tus tiempos, además lo estaba pasando mal en mi trabajo, no me gustaba y hasta tenía ansiedad. Así que decidí renunciar y dedicarme sólo a 'Mi torta bella'", expresó Ayelen que estaba trabajando como administrativa.
Tenía muy en claro que quería tener más tiempo para criar yo misma a mi hija y emprender te permite manejar tus tiempos, además lo estaba pasando mal en mi trabajo, no me gustaba y hasta tenía ansiedad. Así que decidí renunciar y dedicarme sólo a 'Mi torta bella'
Ahora se dedica a su hija, a su familia, a su emprendimiento y a ella misma ya que el cambio también fue para resguardar su salud. "Me preparé mucho, hice cursos de todo tipo, hasta de redes sociales porque el emprendedor tiene que hacer todo, no tenemos ayuda cuando uno empieza todo cuesta, pero mi recomendación es que a pesar que da mucho miedo hay que animarse a emprender y no bajar los brazos es la clave, seguir intentando que las ventas luego aparecen siempre que uno confíe en su producto", aconsejó.
MI TORTA BELLA
La iniciativa de Ayelén es bien variada y contó que accesible para todos. "Trato de poner precios que se puedan pagar, busco precios para poner buena materia prima y a un precio acorde al bolsillo", señaló.
La pastelera realiza todo tipo de tortas artesanales y temáticas, según el pedido del cliente. También hace todo para la mesa dulce y ofrece budines, galletitas, brownies, pastafrolas.
También, como todo emprendedor que quiere dar a conocer su producto se suma a las ferias barriales. Este sábado va a estar en la Feria de la Plaza Lagomersino de 17 a 21 ubicada en Portela 2600, entre Gaito y Chopin (Ex Plaza Portela).
"Además de sentirme feliz haciendo lo que realmente me gusta, la devolución de los clientes es lo más gratificante, la gente es el motor que te permite seguir adelante", concluyó convencida de su decisión, la pastelera de Lomas.