Objetivo cumplido Gracias a la colecta de las Cuentacuentos y a la colaboración de muchas personas solidarias se lograron colocar pizarras en cada cama de internación pediátrica.
Gracias a la colaboración de muchas personas solidarias que se unieron para ser parte del objetivo que se propusieron las Cuentacuentos del Gandulfo, todas las camas de internación pediátrica del hospital cuentan con una pizarra donde se colocará el nombre de cada niño que pase por allí.
Las cuentacuentos, cada miércoles por la mañana, visitan las distintas áreas del Gandulfo para atraer la atención de los más chicos con sus narraciones lúdicas. Pero, para llegar a dicho objetivo, ellas contaron con la ayuda del personal del hospital y con muchas almas solidarias externas al centro de salud que pusieron su granito de arena.
Adriana Molina, fundadora de las Cuentacuentos del Gandulfo, contó: "Este miércoles fue la inauguración de las famosas tablitas que se habían deteriorado mucho y a pesar de probar con distintos elementos y sistemas al fin encontramos la correcta tras una colecta de dinero que hicieron desde el Vivero Los Tilos de Banfield".
Gracias al aporte de los médicos que estuvieron de acuerdo con el proyecto, lograron instalar al pie de cada cama de internación pediátrica las tablitas identificadoras: "Se colocaron de una manera segura gracias a la gente de mantenimiento del hospital y estamos contentas porque son más grandes y coloridas que las que teníamos antes".
Este miércoles fue la inauguración de las famosas tablitas que se habían deteriorado mucho y a pesar de probar con distintos elementos y sistemas para la aplicación de la ley al fin encontramos la correcta gracias a unas pizarras que se adquirieron tras una colecta de dinero que hicieron desde el Vivero Los Tilos de Banfield.
"Lo más importante es que además logramos que una persona de admisión que todos los días pasa por la sala de internación sea la encargada de actualizar el nombre del niño que en ese momento esté ocupando la cama", aclaró Molina que era una de las funciones que más necesitaban ya que las Cuentacuentos van una vez por semana al hospital y no podían tener al día las pizarras.
Respecto a lo que significa este logro para las integrantes de las cuentacuentos, Molina aseguró: "Es una gran satisfacción lo que se siente y un enorme agradecimiento a toda la gente que participó desde los emprendedores de la feria del Vivero Los Tilos, la generosidad de Tamara Bratich que es la responsable del local y la de los médicos que enseguida hablaron con mantenimiento del Gandulfo para que se pudiera hacer esto. No me quiero olvidar de mis compañeras que siempre están presente en cada acción que realizamos".