NIETO 133 Se trata del oficial que le robó el bebé a Cristina Navajas luego de que diera a luz en su cautiverio.
Procesaron al expolicía apropiador del nieto recuperado 133, quien fue hijo de una mujer que estuvo detenida en el Pozo de Banfield y que dio a luz durante su cautiverio.
El nieto 133 recuperó su identidad el pasado 28 de julio, cuando Abuelas de Plaza de Mayo anunció oficialmente su restitución. Confirmaron que era hijo de Cristina Navajas, quien continúa desaparecida, y de Julio Santucho. Además, era nieto de la Abuela Nélida Navajas, ya fallecida.
Según se pudo reconstruir, fue robado por un policía que lo anotó como hijo propio de él y de una enfermera. Desde chico, siempre dudó de su identidad. Fue su hermana de crianza quien le terminó confesando que no era hijo de quienes decían ser sus padres. De esta manera llegó a las Abuelas de Plaza de Mayo, donde tras una larga investigación supo que había sido apropiado y que sus verdaderos padres eran Cristina y Julio.
Tras confirmarse el origen del nieto 133, el juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, procesó al expolicía que se apropió de él tras su nacimiento en 1977. Su identidad fue preservada, pero se sabe que era un oficial que se desempeñó en la Policía Bonaerense entre 1956 y 1980 y que trabajó en la Unidad Regional de Lanús y la Brigada de Investigaciones de La Plata.
Tras su procesamiento, el expolicía se negó a declarar ante el fiscal interviniente y quedó imputado por apropiación de un menor. Por el momento, está detenido con el beneficio de la prisión domiciliaria, al igual que otros represores juzgados por los delitos de lesa humanidad cometidos en el Pozo de Banfield, el Infierno de Lanús, el Pozo de Quilmes y la Brigada de San Justo.
El Pozo de Banfield funcionó durante la última dictadura militar en el cruce de las calles Siciliano y Vernet, en Villa Centenario. Cientos de personas estuvieron detenidas ilegalmente y fueron víctimas de torturas y vejaciones. Muchas mujeres dieron a luz de manera clandestina, entre ellas, Cristina Navajas. El lugar fue reconvertido en Espacio para la Memoria.