Felices Con 15 deportistas federadas, la disciplina del Gasolero retomó los entrenamientos presenciales en el sede social de 9 de Julio con dos encuentros por semana.
Después de varios meses de entrenamientos por Zoom, el patín de Temperley volvió a las prácticas presenciales bajo la nueva normalidad por la pandemia del Coronavirus y las nenas pudieron subirse nuevamente a sus patines, con la felicidad de reencontrarse con sus compañeras y con la idea de prepararse para afrontar las nuevas competencias.
En total, son 15 las nenas -todas las federadas que tiene la institución- las que pudieron retornar los entrenamientos durante la última semana y, de a poco, van recuperando su rutina habitual, ilusionadas como volver a defender los colores celestes en algún torneo.
Bajo un estricto protocolo sanitario, los entrenamientos se realizan dos veces por semana (lunes y miércoles) en el playón del fondo de la sede social del Gasolero al aire libre y se dividen en grupos de no más de cinco patinadoras por turno. En caso de lluvia, según informaron, las clases quedan suspendidas inmediatamente.
"De a poco iremos tratando de retornar a una normalidad. En este caso se optó por una actividad que se desarrolla al aire libre, de forma individual y armando grupos reducidos, con el objetivo de minimizar todos los riesgos de contagio", comentaron desde Temperley.
Y en esa línea, aclararon: "Todo el protocolo será revisado y ante cualquier eventualidad se suspenderá la práctica de la disciplina con el fin de preservar a cada socio y empleado del club".
Son 15 las patinadoras del Gasolero que recibieron la habilitación para retomar los entrenamientos. Todas ellas son federadas y trabajan en grupos de no más de cinco deportistas por turno.
Por este motivo, y conscientes de la realidad que atraviesa el país por la pandemia del Coronavirus, Temperley diseñó unas pautas estrictas que deben cumplirse para el desarrollo de la actividad. Por ejemplo, el uso de tapa boca es obligatorio y los vestuarios no están habilitados, motivo por el que las nenas deben llegar cambiadas desde sus casas. También se les tomará la temperatura antes de comenzar la actividad.
Otra de las medidas que tomó la institución para el retorno de la actividad es que los padres no ingresen a las instalaciones. Es por eso que deberán acompañar a las nenas hasta la garita del estacionamiento, ubicado en la calle Vicente López, donde serán recibidas por la profesora.
Así, con una serie de protocolos y luego de meses de entrenamientos por Zoom, las patinadoras del Celeste comenzaron sus entrenamientos en un año atravesado por la pandemia y, de a poco, empiezan a recuperar la sonrisa, sabiendo que volvieron al lugar donde se sienten más cómodas.