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Perdieron todo en un incendio en Navidad y pide ayuda para volver a empezar

UN LLAMADO A LA SOLIDARIDAD. Una familia de San José se quedó sin nada. Por eso lanzaron una colecta en redes sociales para juntar desde alimentos hasta materiales de construcción. 

"Perdimos todo. Fue un segundo. Las llamas no paraban. Destruyeron todo. No quedó nada." Quien habla es Silvia, vecina de San José. La madrugada del 25 de diciembre, después del brindis de Navidad, un feroz incendio consumió la casa en la que vivían sus dos hermanas. Romina de 40 años murió. La otra, su cuñado y sus sobrinos se salvaron de milagro. Pero se quedaron sin un lugar para vivir. Por eso piden ayuda para volver a empezar.

A través de redes sociales la familia lanzó una colecta solidaria para empezar a reconstruir todo de cero. Necesitan desde lo más básico, como alimentos y artículos de limpieza e higiene personal, hasta materiales de construcción: chapas, puertas, ventanas, inodoro, bidet. También heladera y cocina. "Lo que sea ayuda, para empezar. Aunque sea para arrancar a levantar algo y tener un techo", dice Silvia.

Por el momento se las están arreglando como pueden. Silvia, que vive en lo de su suegra, a una cuadra donde ocurrió todo, cuenta que están viviendo todos juntos. Luego de la tragedia recibió bajo su techo a su hermana, su cuñado y sus tres sobrinos. "Somos un montón, porque aparte yo tengo a mi marido y a mis tres hijos", relata. La falta de espacio se hace sentir.

"Además yo tengo un hijo con parálisis cerebral, que come con botón gástrico. Es paciente de riesgo porque el año pasado perdió un pulmón. Entonces con todo esto de la pandemia él tiene que estar aislado y a esa pieza no puede entrar nadie, los doctores me lo prohíben. Ahí el espacio se hace reducido. En casa o entran las donaciones o entramos nosotros", ilustra.

Hoy, por ejemplo, con la lluvia de la madrugada se les mojó todo lo que tenían en el patio. Eran más que nada "ropa y bolsas", comenta Silvia. Pero no pueden seguir así. Por eso están desesperados por conseguir lo que sea. "Si nos acercan chapas, nylon o machimbre si no tienen otra cosa para armar aunque sea un techito lo vamos a agradecer. Después todo lo que venga es bienvenido", comenta. 

Algunos vecinos del barrio ya aportaron su granito de arena. "El primer día, por suerte, nos acercaron colchones para que mis sobrinos no tuvieran que dormir en el piso, pero nos falta todo", resalta. La necesidad es mucha.

Las personas interesadas en ayudar pueden comunicarse con Silvia al 4264-0073 o al 11-6039-3228 o acercarse hasta la calle Vertiz al 4309, esquina San Juan. Sino, la familia puso una cuenta bancaria a disposición para el que quiera donar dinero  lo haga directamente allí (CBU 0000003100066146631315). La mujer pidió que los que quieran ayudarla por transferencia antes se comuniquen con ella.

"Prefiero que me llamen y yo les paso todos los datos, porque nos enteramos que están pidiendo plata a través de cuentas de gente que no conocemos, que ni siquiera viven acá y no quiero que nadie ande estafando a la gente. Solo estamos recibiendo las donaciones nosotros, personalmente, y nadie está haciendo colectas en efectivo", aclaró, por las dudas.

LA MADRUGADA DE LA TRAGEDIA

En Navidad Romina pasó la noche con Silvia y su familia. Compartieron una cena todos juntos y después de brindar, como había trabajado durante todo el día y estaba cansada, se fue a dormir. Nunca imaginó que un simple desperfecto eléctrico (eso se cree) le costaría la vida. Las llamas no le dieron tiempo a nada. La casa de Tarija al 2604 ardió en cuestión de segundos. 

En cambio su hermana y su cuñado, que viven al lado, corrieron mejor suerte. También sus sobrinos no se encontraban en el lugar. "Cuando yo llegué ellos ya estaban a salvo, pero a mi hermana no la llegaron a sacar", se lamenta Silvia. 

La casa era de sus padres. Silvia y sus hermanas nacieron allí. "Después, con el tiempo, ellas se quedaron las dos ahí y yo me vine a vivir a la casa de mis suegros que es apenas a una cuadra", cuenta la mujer. Hoy en el lugar solo quedan escombros.

Ayer una retroexcavadora y trabajadores de la Municipalidad se acercaron hasta el lugar para limpiar lo que quedaba. Y la familia ya empieza a pensar en la reconstrucción. "Con poquito, con lo que sea, la idea es empezar a hacer algo", cierra.

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