Miguel Ángel Russo y su gran amor con el pueblo Granate
qepd. Fue entrenador de Lanús en los periodos 1989-1994 y 1999-2000 y el artífice de los ascensos conseguidos en 1990 y 1992.
Miguel Angel Russo, el director técnico de Boca Junios, dejó este mundo esta tarde, a sus 69 años. Configuró durante casi 40 años una enriquecida carrera como entrenador en diversos clubes con los que conformó vínculos de gran respeto y cariño, entre ellos, Lanús, con el que logró dos ascensos. Además, en el Granate hizo su primera experiencia como DT.
EN EL CORAZÓN GRANATE
Con 33 años recién cumplidos, Russo aceptaba el desafío que le propusieron los dirigentes de Lanús, club al que siempre le estuvo agradecido por esa oportunidad: "Me vinieron a tocar el timbre de mi casa para ofrecerme el cargo. Ellos se la jugaron conmigo, y yo con ellos, porque era un momento bravísimo. Acababan de perder el ascenso contra Chaco For Ever en la última fecha y el club era un velorio. El primer entrenamiento fue una cosa increíble: ocho dirigentes me presentaron a siete jugadores. El panorama era oscuro, porque el golpe se había sentido. Arrancamos el Nacional B más o menos, pero se terminó armando un buen grupo y logramos regresar a primera luego de 13 años".
Aquella temporada 1990/91 no fue fácil y Lanús descendió nuevamente. A contramano de lo que ocurría (y ocurre), los directivos mantuvieron la confianza en Miguel, que la retribuyó con un nuevo ascenso en 1992. Se quedó en el cargo hasta mediados del '94, volvieron a poner a los Granates como protagonistas. Estudiantes había perdido la categoría y Russo acudió al rescate. En dupla con Eduardo Manera, lo regresaron enseguida, con un equipo inolvidable, donde se destacaban Verón, Capria y Calderón, entre otros.
La promesa estaba cumplida. Después del 30 de mayo de 1992, Lanús nunca regresó al ascenso. Luego tendría una segunda etapa breve en el club, en la temporada 1999-2000.
Los hinchas y el club siempre lo recordarán por esos logros históricos.