Barker, el legado de los primeros inmigrantes y un orgullo educativo
De puño y letra. Hoy los invito a meterse en el sector de la educación. Más precisamente, en uno de los colegios más antiguos y prestigiosos del distrito.
Hola, amigos de La Unión. Nos volvemos a encontrar en las páginas del viejo y querido diario del barrio para seguir conociendo historias sobre los hombres, mujeres e instituciones que marcaron a fuego a Lomas de Zamora. Hoy los invito a meterse en el sector de la educación. Más precisamente, en uno de los colegios más antiguos y prestigiosos del distrito, que remonta sus inicios a la llegada de los primeros europeos por la creación del ferrocarril: comprender su historia sirve para entender mejor la realidad de la zona hoy en día. Les presento al Colegio Barker.
En sus primeros años, el Barker estaba ubicado en la esquina de Gorriti y la avenida Meeks. Su nombre se debe a que Charles Octoby Barker, quien fuera secretario gerente del ferrocarril y muriera en Buenos Aires el 20 de marzo de 1893, tuviera una destacada labor profesional en la empresa. Durante su gestión, el tren extendió su recorrido hasta Bahía Blanca, con ramales hacia Mar del Plata, Necochea, Saladillo y otras localidades del sur bonaerense.
En la asamblea anual de accionistas realizada el 19 de octubre de 1893, el presidente del directorio del Ferrocarril elogió en un discurso la actuación de Barker y propuso la construcción de un edificio que perpetuase su memoria. El edificio debía levantarse en Lomas de Zamora, localidad preferida por Barker, y debía ser una escuela con aulas amplias para poder citar a la colectividad inglesa a sus reuniones sociales.
Se propuso el nombre de "Barker Memorial Hall" y pidió autorización para ayudar a su construcción con la suma de 2.000 libras esterlinas, cifra que se obtuvo por medio de una suscripción vecinal. El proyecto fue aprobado y se puso rápidamente manos a la obra. El edificio respetó el estilo arquitectónico británico, es decir, un típico chalet de dos plantas con amplias ventanas. Fue inaugurado el 21 de agosto de 1897 con una gran fiesta.
La institución Lomas School Committee abonó a la empresa Ferrocarril del Sud la suma de 500 libras esterlinas en dos cuotas y en compensación ésta cedió el edificio para ser destinado a una escuela, que funcionó durante varias décadas en la esquina de avenida Meeks y Gorriti, muy cerca de la estación de trenes.
Las primeras promociones de estudiantes fueron hijas de inmigrantes británicos, aunque con los años se fueron abriendo a otras colectividades. El nivel educativo siempre fue muy exigente y el nivel del idioma inglés se destacó entre las instituciones privadas de Buenos Aires. Hacia fines de la década del 50, el espléndido chalet fue demolido y el Colegio Barker se mudó a su actual ubicación, en la avenida Meeks esquina Mitre. Hoy, el Barker, con su uniforme marrón con detalles en celeste y dorado sigue siendo una referencia educativa de zona sur. Es, en definitiva, otro de los orgullos lomenses.