El fuerte pedido de un lomense para recuperar el Torino que fue de su padre

Sentido significado. Mauro Pisano reconstruyó un modelo similar al auto que era de su papá, el que buscó por años y que, al encontrarlo, no logró aún que su dueño actual se lo venda.

A diferencia del común de las personas que ven a los autos como un medio de transporte, para Mauro Pisano, no lo son. Este vecino de Lomas busca comprar un Torino coupe que perteneció a su padre Antonio, quien lo vendió en los años 80. Su hijo lo encontró hace poco menos de cinco años, pero recuperarlo es más un deseo que una realidad que roza la obsesión. 

El vecino, de 45 años, lo buscó durante varios años junto a sus hermanos, Javier -quien falleció- y Fernando, y al no encontrarlo compraron un Torino ZX. Era similar al de su papá, aunque Mauro se transformó en único dueño, en el año 2001, luego de comprar las partes legales correspondientes de sus hermanos, quienes emigraron a Italia a raíz de la crisis económica del país.

El objetivo de ellos era entregarlo al extinto Plan Canje, que consistía en que las personas entregaran vehículos con 10 años de antigüedad o más, para desguace y a cambio recibían un certificado con un descuento para comprar un auto 0 km o un usado.

Mauro, ingeniero mecánico formado en la Escuela Técnica N°5 de Temperley, contó su historia al Diario La Unión. Además, renovó el pedido a Juan Carlos, el propietario actual del auto que fue furor en el país décadas pasadas en la historia automotriz nacional. "Mi viejo tenía una coupe Torino que la compró 0 kilómetros, en los años 80. Él falleció cuando yo era chico, la vendió días antes de que esto ocurriera y crecí con eso en la cabeza", señaló. 

"Me recibí de Técnico Automotor en el Industrial de Temperley, cuando se estudiaba la mecánica de los autos de la categoría Sport Prototipo, Fórmula 1 Mecánica Nacional, la cual era la del Torino. Y, los profesores que tuve eran de la época en la que este coche competía. Después seguí estudiando y me recibí de ingeniero mecánico, trabajo en el área de investigación y desarrollo mecánico del INTI, siempre ligado a la parte automotriz. Soy profesor en la parte de motores en la parte de máquinas de combustión interna", añadió.

Sobre cómo llegó su actual auto a sus manos, Mauro explicó: "Este auto lo compré en el año 1996 con mis hermanos. Primero buscamos la coupe que era de mi papá, nunca la pudimos encontrar y terminamos comprando este auto. Desde los 17 le comencé a hacer toda la mecánica, la usé, pasó el tiempo y la tengo hace un montón de año". 

Y agregó: "En el 2001, mis hermanos se fueron a vivir a Italia, lo iban a entregar en la época del Plan Canje. En el medio de ese lio que atravesaba el país, yo trabajaba con mi tío en un taller en la tornería y juntaba la plata para pagar la parte de ellos y me lo quedé. En ese momento, significó todo 4000 dólares, cuando el dólar estaba 1 a 1".    

El hijo de Antonio, además, detalló el hallazgo del Torino de su padre 40 años después. "Buscando unos papeles en la casa de mi mamá encontré un acta de choque que mi papá tuvo con la coupe junto a una patente vieja. Contacté a un gestor y la encontré a través de Google Maps, hace cinco años. La tiene un hombre en Quilmes, a quien todos años se lo intento comprar", explicó.

Mauro contó que hice miles de intentos para que este auto regrese a sus manos, pero ningunos de estos intentos fueron con éxitos. "El auto está arrumbado en un lugar desde el año 1999, tal cual armada como la tenía mi viejo y no puedo hacer que me lo venda. Lo último que hice fue llevarle fotos del Torino cuando era de mi viejo y los papeles originales. Incluso, hice un pedido de dominio y figura que mi papá era el primer dueño", reveló.

En el nombre del padre

Al momento de ahondar en la significancia que tiene su auto, Mauro confesó: "El Torino es una forma de recordar a mi viejo. Tal vez, me hubiese sido más barato pagarme una psicóloga que todo lo que gaste en el auto".

"Hoy quizás la gente lo ve como un cachivache viejo, pero representa ver a mi viejo y a uno de mis hermanos, Javier, que también falleció. Espero que mi hijo siga por este camino, quizás cuando es más grande lo venda. Todo gira en torno a recordar a mi papá", admitió.

Sobre las distintas restauraciones que le hizo a su Torino ZX, Mauro precisó que "el auto se hizo como era originalmente, desde las llantas hasta el motor y tren delantero". Incluso, la última modificación fue realizada por otro lomense que es dueño de una camioneta Chevrolet convertida en hot rod. "En el 2013 el auto fue repintado por Fabián Couto", apuntó.

 Por su parte, Mauro destacó la relevancia de esta marca en la historia del automovilismo nacional. "Es un auto que tiene mucha historia a nivel automovilístico y de ingeniería. Además, tiene mucha historia a nivel diseño. Trabajando con gente en el INTI lo hice con personas que trabajaron el desarrollo del Torino que compitió en las 84 Horas de Nürburgring. Por ejemplo, el ingeniero Gustavo Durán, Heriberto Pronello", resaltó.

Este auto está propulsado por un motor Torino, que es un bloque motriz derivado del Tornado que vino en los modelos de 1967 hasta mediados del '73-. Está conformado por 6 cilindros en línea con una cilindrada de 3.7 litros, que es capaz de alcanzar 200 HP con unos 31 kilográmetros de torque. Esta configuración motriz le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 10.6 segundos y una velocidad máxima de 200 Km/h. 

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