"No preguntes, me la mandé": testimonio clave por el crimen del empresario
NUEVA DECLARACIÓN. Matías Gil, uno de los imputados, aseguró que no tuvo nada que ver con el asesinato de Fernando Pérez Algaba pero dejó frases reveladoras.
El crimen de Fernando Pérez Algaba, el empresario que apareció descuartizado en Ingeniero Budge, sumó un nuevo capítulo a partir de la declaración espontánea de uno de los imputados. Se trata de Matías Gil, quien negó haber participado del crimen pero soltó frases que pusieron un nuevo manto de sospecha sobre Maximiliano Pilepich y Nahuel Vargas, los principales acusados del homicidio.
Si bien admitió ser amigo y "mano derecha" de Pilepich, Gil sostuvo que no tuvo nada que ver con el asesinato del empresario y relató en detalle cuáles fueron sus movimientos el 18 de julio, día en que Pérez Algaba fue visto por última vez en el predio "Renacer" de General Rodríguez. Explicó que estaba jugando al pádel en Bella Vista cuando recibió un llamado de Pilepich, quien le pidió encontrarse con él en una farmacia.
Cuando se vieron, Pilepich le pidió que se dirigiera al predio Renacer, con una frase inquietante. "Amigo, todo mal, necesito que vayas al campo y esperá a que vuelva", le habría dicho. "Me pide el teléfono y lo pone en modo avión. Me dice 'después te cuento'. No me sorprendió el pedido ya que nada solía ser muy normal en la vida de Maximiliano", añadió Gil, quien luego se dirigió al predio y estuvo hasta la medianoche. Aclaró que no vio nada sospechoso y que no sabía sobre el crimen del empresario.
Siguiendo con el relato, contó que al día siguiente Pilepich le pidió que vaya con Vargas, otro de los acusados, a llevarle una suma de dinero al imputado Luis Alberto Contrera a Lomas de Zamora. Los investigadores creen que éste último fue quien se deshizo del cuerpo y lo arrojó dentro de una valija al Arroyo del Rey, en Ingeniero Budge.
Gil reveló que "en el viaje con Nahuel fue todo raro, ya que no hablaba mucho" y describió que lo vio "pálido y con la mirada desencajada". Cuando le consultó qué le pasaba, Vargas le respondió: "No preguntes. Me la mandé, no daba para más".
Finalmente, en su declaración, Gil insistió en su inocencia: "No maté a nadie. No vi a nadie matar a ninguna persona. No planifiqué ninguna muerte. No tenía ninguna deuda con Pérez Algaba".
Luego de este testimonio, al fiscal Marcelo Domínguez sólo le queda escuchar la palabra de Pilepich, acusado de ser el autor material de los disparos que mataron a Pérez Algaba. Luego de haber suspendido su declaración por problemas de salud, se espera que pueda hablar el próximo lunes.