La historia detrás de la cafetería lomense que funciona en una casa de 1933

JOYA ARQUITECTÓNICA. El Nido se inauguró en 2014 en un espacio que tiene 90 años de historia: aún se conservan pisos, vidrios y techos originales. Tiene, aseguran, la primera pileta privada que tuvo Lomas.

Una especie de cápsula del tiempo en medio de la urbanización de Lomas. El Nido Arte y Cafetería es un espacio gastronómico que tiene la particularidad de brindar clases de formación de arte con distintas técnicas. Lo mágico es que funciona en una casa familiar que data de 1933. Mariano Di Lernia (40), fundador y uno de los directores de El Nido, el encargado de dar a conocer la historia y los inicios de este espacio que brinda una propuesta totalmente distinta para los vecinos.

La casa donde hoy funciona El Nido está ubicada en Manuel Castro 478. Dicho hogar fue construido por el alemán Erich Zeyen en 1933 (creador de barrios como Ciudad Jardín en El Palomar) para poder residir allí junto a su familia.

"Yo llegué a este lugar en 2011 y la casa estaba muy deteriorada, tal como la habían dejado los inquilinos anteriores. Llevamos a cabo obras recuperación y mantenimiento y en julio de 2014 se inauguró el espacio", empezó a explicar Mariano.

El Nido cuenta con una planta baja destinada al sector gastronómico, tanto las salas interiores como el jardín exterior, donde los clientes pueden desayunar, almorzar, merendar o cenar. "La casa estaba compartimentada y luego de las reformas se hicieron espacios más amplios", admitió el fundador, aunque aclaró que la planta baja fue lo que más se intentó conservar, contando con pisos originales de calcáreo y madera, como así también las puertas, las arcadas de madera, los vidrios y los techos.

La planta baja fue lo que más se intentó conservar, contando con pisos originales de calcáreo y madera, como así también las puertas, las arcadas de madera, los vidrios y los techos.

Dentro de sus joyas arquitectónicas resalta, sin duda, una pileta que, según se dice, es "la primera pileta privada de Lomas" aunque actualmente no está en uso. En lo que sería el hogar de los caseros hoy se pueden ver oficinas y la escuela de música donde se dictan clases. "En el primer piso y segundo piso, que se construyeron en las décadas del '60 y '70, hay salones que se usan para talleres y encuentros", agregó el lomense.

"En el espacio tenemos un piano que, según tenemos entendido, está ubicado en el mismo lugar del que era propiedad de la familia Zeyen. Además, tenemos libros que los propios clientes nos traen y que están distribuidos en los seis hogares a leña que hay aquí", admitió.

"Todos los clientes nos destacan y resaltan la energía positiva que tiene el lugar, siendo un sitio atemporal. Es un espacio que te acobija y que tiene rincones que son muy parecidos a los de un hogar propio", explicó Di Lernia.

La historia se viralizó ya que una vecina llamada Samanta Niedzwiadek publicó en el grupo de Facebook llamado Lomas Conectado distintos datos de la casa donde funciona la cafetería, resaltando que el sitio es uno de los pocos de la zona que es Pet Friendly.

El Nido, que tiene más de 20 empleados, tiene abiertas sus puertas de lunes a jueves de 8 a 22, los viernes y sábados de 8 a 00 y los domingos y feriados de 10 a 22.