El "Sgt. Pepper's" de Los Beatles cumple 55 años
va de retro. Se trata del mejor disco de los Fab Four, y quizás también el de la historia del rock, que revolucionó el sonido del grupo.
En 1966, Los Beatles habían decidido dejar de tocar en vivo agotados por sus giras maratónicas y también por estar asqueados de la Beatlemanía, por los gritos ensordecedores del público en cada show y por el acoso de los medios de prensa, que los seguían a sol y a sombra.
También su estética de flequillos y trajecitos había tocando fondo y además pretendían otras búsquedas estilísticas a su estilo compositivo, en procura de la experimentación y del agregado de nuevos sonidos y de instrumentos que fueran más allá del estilo del cuarteto de John Lennon, Paul McCartney, Ringo Starr y George Harrison.
"Estamos hartos de hacer música ligera para gente ligera, y también estamos hartos de tocar para esa gente", había declarado John por entonces.
La primera aproximación a esta búsqueda fue "Rubber Soul", en 1966, y al año siguiente ya patearon el tablero con "Revolver", un álbum donde comenzaron a bucear en la psicodelia y a romper con el formato tradicional de la canción pop de esos años.
En su revolución permanente y en el momento incierto en el que se encontraban, los Fab Four pusieron al mundo del rock patas para arriba con el "Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band", un disco revolucionario y que marcó un quiebre en la cultura pop del Siglo XX, que se público el 1° de junio de 1967, hace exactamente 55 años.
Bajo la tutela artística de George Martin, el productor histórico de la banda, las sesiones de "Sgt. Pepper's", el octavo disco del grupo y quizá el mejor disco de la historia del rock, comenzaron a finales de noviembre de 1966, y se extenderían por 129 días en los estudios Abbey Road, con una serie de canciones que formarían un álbum temáticamente unido por las infancias de los cuatro Beatles, un concepto ideado por Lennon.
De todos modos, las demoras en las grabaciones y las presiones que sufrió Martin de parte de EMI, obligó a que ese proyecto conceptual se resquebraje parcialmente por el lanzamiento anticipado de "Penny Lane" y "Strawberry Fields Forever". Estos dos temas iban a ser parte del disco y que terminaron lanzándose en un simple.
La idea conceptual del disco surgió mientras se ensayaba el tema homónimo al álbum, cuando a Paul se le ocurrió que todas las canciones fueran presentadas como si hubiera sido grabada por otra banda, las del Sargento Pepper a la que aludía la letra.
Tiempo después, el propio McCartney admitió que la idea de hacer un álbum conceptual se le había metido en la cabeza desde que se topó con el genial "Pet Sounds", de The Beach Boys, considerado como el pionero en este estilo. George Martin también aseguraría que "sin 'Pet Sounds', 'Sgt. Pepper's' no habría existido [ ] Pepper fue un intento de igualar a 'Pet Sounds'".
"Pensé, dejemos de ser nosotros. Creemos un álter ego [ ] no íbamos a ser nosotros haciendo toda esa música, no íbamos a ser The Beatles, sería otra banda completamente diferente, así que fuimos capaces de perder nuestras identidades en esto", dijo Paul.
A pesar de las intenciones, el "Sgt. Pepper " termina coqueteando con la idea de disco conceptual, más que concretándolo, por el sonido unificador de los temas y el agregado de un "reprise" de la canción principal sobre el final, a modo de epílogo.
Como era moneda corriente, John y Paul monopolizaron la autoría y las primeras voces de los temas del disco. Lennon aportó la surrealista letra de "Lucy in the sky with diamonds", inspirada en un dibujo realizado por su hijo Julian, cuyas iniciales aludían al LSD. También John sumó a "Being for the benefit of Mr. Kite", "Good morning, good morning" y "A day in the life".
Mientras que Paul es se lució en su labor compositiva en "Getting Better", "She's leaving home", "Fixing a Hole", "When I'm Sixty-Four", "Lovely Rita" y en la canción que da título al disco.
George y Ringo también tendrían reducidos momentos para el lucimiento personal en el álbum con la hindú "Within you without you" y el clásico "With a little help from my friends", respectivamente.
Además de la participación de una orquesta sinfónica y de una pródiga instrumentación, el disco revolucionarias técnicas de grabación y el aporte de efectos de sonidos y de otros artificios.
Con Martin al mando de la consola, con John y Paul de laderos, los temas tuvieron múltiples sobregrabaciones y escasas sesiones tocando en conjunto, lo que resultó tedioso para los integrantes del grupo.
El "Pepper?s" pasó 27 semanas en la cima del UK Album Chart en el Reino Unido;11 y alcanzó el primer lugar del Billboard 200 de Estados Unidos, manteniéndose ahí durante 15 semanas. Además, es uno de los álbumes más vendidos de la historia, con 32 millones de discos vendidos.
El disco marcó un quiebre por las técnicas de grabación y por hacer añicos el molde la canción pop tradicional de los '60. Con este álbum, Los Beatles tocaron su propio techo y solo el "Álbum Blanco" los volvió a poner en es épico creativo tan elevado.
LA PORTADA
La ruptura estética del "Pepper?s" también incluyó un arte de tapa innovador para la época y que parodiado luego en muchas oportunidades.
La portada fue diseñada por el artista pop Peter Blake que incluyó una fotografía de los cuatro Beatles vestidos como sargentos delante de un collage de rostros célebres con un vestuario creado por la casa inglesa de diseño Berman.
Además de los Fab Four, aparecen en la tapa del disco, entre los rostros célebres, Marilyn Monroe, Marlon Brando, Mae West, Edgar Allan Poe, Aleister Crowley, Bob Dylan, Oscar Wilde, Karl Marx, D.H. Lawrence y hasta Shirley Temple.
A pesar de la original propuesta estética, Los Beatles aceptaron la recomendación de la discográfica EMI para no incluir en ese conjunto de personalidades a las imágenes de Jesús y de Gandhi, para eludir futuros conflictos con la Iglesia Católica y con la India.