"Titanes en el ring", la creación de Martín Karadagián
tv retro. El "Armenio" ideó un show televisivo de lucha libre y se mantuvo exitosamente por 25 años en pantalla.
"Titanes en el ring" fue el primer show televisivo de lucha libre del país, también conocido como catch, que se convirtió en un éxito comercial y en clásico.
El padre de esta criatura fue Martín Karadagián, un humilde porteño de ascendencia armenia que a partir de su inventiva se ganó un lugar en la cultura popular argentina.
El ciclo tenía una variopinta y excéntrica compañía de personajes, mucho histrionismo arriba del cuadrilátero, estadios colmados por niños y adultos, juguetes, golosinas, figuritas y discos con canciones dedicadas a cada luchador.
Todo comenzó en los '40, cuando después de años de hacer changas y trabajar en una carnicería del barrio de San Telmo para aportar lo suyo a un hogar empobrecido hogar, entró al mítico Luna Park.
Con su pequeño físico y con sus dotes actorales, logró hacerse un lugar entre el equipo de "catch" que entrenaba en el lugar, liderado por "El Hombre Montaña" y el polaco Karol Nowina, y en cuestión de años se transformó en uno de los más reconocidos de ese circo impostado de lucha.
En 1961 le llegó su gran oportunidad cuando Alberto Olmedo y su entrañable recién llegado Capitán Piluso lo desafiaba para combatir en el ring en la "Pelea del Siglo".
El evento, que tuvo lugar el 12 de noviembre y tuvo como ganador al rosarino con la ayuda de su compañero, Coquito.
A pesar de perder la "pelea", le ofrecieron un contrato a Karadagián, que un año más tarde vería condensado en la concreción de su gran idea, con la primera emisión de "Titanes en el ring" en Canal 9.
De esta forma, él mismo, junto a la "Momia Blanca", el "Caballero Rojo", el "Ancho" Rubén Peucella y el "Hombre Vegetal", por nombrar solo algunos del listado, tomaron los roles protagonistas de un show.
Pensado para adulto, rápidamente captó a los chicos a partir de las máscaras, los disfraces y la narrativa bizarra de buenos contra malos.
Con un carisma implacable y recordada profesionalidad, Karadagián llevó adelante su ciclo saltando también al Canal 11 y al 13. Además, hasta su última emisión en 1988, el programa también tuvo sus adaptaciones en el cine.
"Todo esto es tongo, pero del bueno", había dicho alguna vez el "Armenio" en los primeros tiempos su propuesta que contaba con los relatos de Rodolfo Di Sarli y más tarde de Jorge Bocacci, y que consiguió mezclar la lucha, el "catch" reinante de la época, con lo teatral y la ficción total.
Con un carisma implacable y recordada profesionalidad, Karadagián llevó adelante su ciclo saltando también al Canal 11 y al 13. Además, hasta su última emisión en 1988, el programa también tuvo sus adaptaciones en el cine.
Pero para ese momento, la salud de Karadagián ya comenzaba a deteriorarse luego de que en 1983 comenzara a sufrir desmayos y un año más tarde debió someterse a la amputación de su pierna derecha a raíz de un infarto.
Ayudado por un trípode y oficiando de jurado, el "Titán" se negó a rendirse y abandonar su creación, y tres años más tarde, en 1991, murió a los 69 años víctima de un edema pulmonar.
