Nueve mujeres denunciaron a Plácido Domingo por acoso sexual
ESCÁNDALO EN EL MUNDO DE LA ÓPERA. En un artículo publicado por la agencia de noticias Associated Press ocho cantantes y una bailarina afirman que el tenor las presionó para que tener sexo cuando trabajaban con él.
Ocho cantantes y una bailarina denunciaron públicamente que sufrieron acoso sexual de Plácido Domingo director artístico y general de la Ópera de Washington durante 15 años. Los hechos fueron revelados por una investigación publicada por la agencia de noticias Associated Press y habrían sucedido a lo largo de tres décadas desde finales de 1980.
"¿Tienes que irte a casa esta noche?", le susurraba al oído el cantante español a la mezzosoprano Patricia Wulf. "Cada vez que bajaba del escenario, estaba entre bambalinas esperándome”, explicó la única de las nueves mujeres que dio su nombre y apellido, para relatar abusos que desataron la polémica en la prensa internacional.
“Se pegaba a mí, todo lo cerca que podía, ponía su cara directamente junto a la mía, bajaba el tono de voz y decía, ‘Patricia, ¿no quieres venir conmigo?’”, detalló, según lo publicado por la prensa española a partir de testimonios relevados por AP.
Ella lo rechazaba, pero Domingo no cesaba en sus proposiciones, señaló la mujer, quien contó que intentaba esconderse de él en su camerino y asomaba la cabeza para asegurarse de que no estaba en el pasillo para salir del lugar.
“En cuando te apartas y sales, piensas ‘¿Acabo de arruinar mi carrera?’ y así fue durante toda la producción”, explicó.
Ocho cantantes y una bailarina revelaron que sufrieron acoso sexual del superastro español de 78 años, quien lleva décadas casado, en ocasiones en compañías de ópera en las que él ocupaba puestos de dirección.
Una de las mujeres dijo, bajo anonimato, que Domingo metió la mano dentro de su falda, y otras tres relataron que forzó besos húmedos en la boca dentro de un vestuario, una habitación de hotel y una comida de trabajo.
“Una comida de trabajo no es (algo) raro”, dijo una de las cantantes. “Que alguien intente agarrarte la mano durante una comida de trabajo es raro, o que te ponga la mano en la rodilla es un poco raro. Siempre te estaba tocando de alguna manera”, indicó.
Otras dos testimonios refieren haber cedido brevemente a las proposiciones de Domingo al creer que no podían poner en peligro sus carreras rechazando al hombre más poderoso de su profesión.
Una cantante que está entre las acusadoras tenía 23 años y actuaba en el coro de la Ópera de Los Ángeles cuando conoció al superastro en 1988. Dijo que recordaba haberse limpiado la saliva de la cara luego de "un torpe y húmedo beso en el escenario", tras lo que el tenor le susurró “Ojalá no estuviéramos en el escenario”.
La mujer agregó que Domingo empezó a llamarla a casa a menudo, aunque ella no le había dado su número. “Decía cosas como ‘Ven a mi departamento. Cantaremos unas arias. Te asesoraré. Me encantaría escuchar lo que puedes hacer para una audición’”, apuntó.
Otra joven cantante en la Opera de Los Ángeles cuando Domingo había sido designado como nuevo director artístico, dijo que empezó a llamarla a su casa inmediatamente después de conocerla en un ensayo en 1988.
“Decía ‘Voy a hablarte como el futuro director artístico de la compañía’ y hablaba de posibles papeles”, comentó.
La mujer relató que en una de las visitas de Domingo a su camerino, el tenor admiró su ropa, se inclinó para besarla en las mejillas y colocó una mano en un lateral de su pecho.
La cantante, que tenía 27 años y estaba empezando su carrera, dijo que en ese momento se sintió "atrapada" y terminó cediendo porque temía que de lo contrario terminaría su carrera en la ópera.
La joven contó que fue al departamento del tenor, donde practicaron “tocamientos” y “manoseos”. “Me sentí como una presa. Me sentí como si me estuviera cazando”, dijo la mujer, quien explicó que se sintió animada para denunciar gracias al movimiento #MeToo.
Ante las denuncias, el tenor de 78 años respondió que creyó "siempre" que todas sus "interacciones y relaciones" con mujeres eran "bienvenidas y consensuad