“Rebeca”, el arribo de Hitchcock a Hollywood, cumple 80 años
Va de retro. El film, basado en la novela de Daphne du Maurier, llegaba a las salas en 1940 con el primer film del británico rodado del otro lado del Atlántico. Fue protagonizado por Joan Fontaine y Laurence Olivier.
LA PELÍCULA SE ESTRENÓ EN MARZO DE 1940.
SE QUEDÓ CON DOS OSCAR DE LA ACADEMIA.
Basado en la novela “Rebeca”, de Daphne du Maurier, hace 80 años se estrenaba "Rebeca, una mujer inolvidable", uno de los grandes clásicos de la frondosa filmografía de Alfred Hitchcock y que marcó su ingreso a la industria.
El film tuvo su espectacular première en Miami, Florida, el 21 de marzo de 1940 y siete días después se estrenó en Nueva York, en uno de los hitos del séptimo arte de aquel año. El film llegó a las salas argentinas en junio de ese año, en tiempos en los que los estrenos anglosajones demoraban en arribar al cono sur.
“Rebeca” fue la primera película filmada en los Estados Unidos por el director británico y también su debut en Hollywood, la Meca de la industria, rodada durante mientras comenzaba la Segunda Guerra Mundial.
Protagonizado por Joan Fontaine, una de las estrellas de la era dorada de Hollywood y que llegó a un pico de popularidad con este film, y por Laurence Olivier, un actor británico que también acarició la consagración con esta película.
El reparto lo completaron George Sanders, Judith Anderson, Nigel Bruce, Reginald Denny, C. Aubrey Smith, Gladys Cooper y otras figuras.
La película comienza con un recorrido sobre los brumosos jardines de la residencia de los recién casados. "Anoche soñé que volvía a Manderley", dice la protagonista en off y es su único comentario de ese modo en todo el metraje- y da a entender que lo que viene pertenece al universo de la imaginación o los sueños.
La película gira en torno al papel desempeñado por una joven apasionada a la par que inocente, quien toma la decisión de contraer matrimonio con un aristócrata con el objetivo de asegurarse un futuro próspero y alentador a su lado.
Pero la vida no va a ser nada fácil en su nuevo hogar, Manderley, la gran mansión de su marido, sobre todo teniendo en cuenta los múltiples fantasmas del pasado que se le van a aparecer constantemente a su esposo en dicho domicilio.
ALGUNAS APOSTILLAS. “Rebeca, una mujer inolvidable" tuvo una grata recepción a pesar de algunos cuestionaron el modo británico de rodar que tenía Alfred Hitchcock según los cánones de Hollywood.
La película fue nominada en febrero en once categorías para los premios de la Academia correspondientes a 1940. Puedo alzarse con las estatuillas como mejor película y mejor montaje en blanco y negro.
Precisamente, con el fin de mantener el ambiente oscuro del libro, Alfred Hitchcock, insistió en que la película se rodará en blanco y negro.
Alfred Hitchcock quería haber hecho esta película años antes, pero fue incapaz de pagar los derechos de la novela hasta 1940.
Más de una veintena de actrices se presentaron al casting para el papel de la señora de Winter, que finalmente quedó para la debutante Joan Fontaine.
Una de las aspirantes fue Vivien Leigh, con auspicio de Laurence Olivier, ya que eran la pareja del momento. La actriz se quedó sin el papel, pero si logro uno en “Lo que el viento se llevó” y encima ganó un Oscar ese personaje.
Debido al éxito de esta película en España, las chaquetas específicas que Joan Fontaine usa durante la película comenzaron a ser conocidas como "rebecas". Este tipo de prendas de vestir aún se conocen con ese nombre en algunos puntos del gl
