El 10 de febrero arranca el juicio por el homicidio de Fátima Catán

Por el hecho será juzgado Martín Santillán, el marido de la peluquera embarazada que murió tras sufrir quemaduras en el 85% del cuerpo. El crimen ocurrió en 2010.

A cuatro años del crimen de Fátima Catán, la familia de la joven que murió en Fiorito tras sufrir quemaduras en el 85% del cuerpo, conoció la fecha del juicio oral. “Nuestro abogado nos informó que a Martín Santillán lo van a empezar a juzgar el 10 de febrero próximo”, dijo Nahuel Catán, el hermano de la peluquera, que estaba embarazada de tres semanas.

Ante los tribunales de Lomas, el acusado (35) deberá enfrentar cargos por el delito ”homicidio simple en el contexto de violencia familiar”.

Mientras llega la fecha, la familia aguarda que la Cámara de Apelaciones de Lomas le anule el arresto domiciliario que le otorgaron hace dos meses al hombre que está acusado de prender fuego a su mujer, de 24 años. “Esperamos que los camaristas fallen a nuestro favor, y que Santillán vuelva a la cárcel, de donde nunca debió haber salido”, expresó el joven (23), quien era “muy unido” a su hermana mayor.

Hasta que la Cámara tome una decisión, Santillán pasa sus días en la casa de un hermano que vive en Budge.

El abogado de la familia, Gabriel Jurich, contó que el imputado obtuvo ese beneficio porque la Justicia consideró que en la cárcel “corría peligro” por el delito que cometió y, además, porque “ayudó a evitar una fuga” que estaban planeando en la alcaidía de Lomas.

El hecho que le endilgan sucedió el 18 de agosto de 2010, cuando “Faty” y Santillán se encontraban en la vivienda que compartían en Murature al 1600. Allí, la pareja tuvo una discusión, y la joven terminó prendida fuego.

El marido la llevó al Hospital Evita, de Lanús, y le dijo a los médicos que ella “se había quemado sola” y que se había querido matar durante una pelea de pareja. Pero desde un principio, la madre de ella no creyó en su relató porque sabía que la muchacha estaba “muy ilusionada” con el bebé que estaba esperando".

Como estaba muy grave, los médicos decidieron trasladarla al San Martín, de La Plata. Allí, peleó por su vida hasta el 23, cuando su corazón dijo basta.Tras un gran derrotero judicial, los familiares lograron que la Justicia los escuchara y Santillán fuera preso. Para eso, pasaron dos años. Ahora, aguardan que se pruebe que “él la asesinó