Con el puente de Molina Arrotea terminado, trabajan en el Arroyo
.
El Municipio construye una rampa sobre una de las paredes del cauce que permitirá el ingreso de maquinas y camiones para limpiar el canal. En los próximos días, demolerán los antiguos pilotes para permitir el normal escurrimiento del agua.
El puente de Molina Arrotea es una realidad. Por estos días, los vehículos ya circulan conectando con mayor fluidez Lomas Oeste y Parque Barón a través de esta calle. Sin embargo, debajo del mismo, en el cauce del Arroyo del Rey, continúan trabajando para culminar la obra.
El Municipio trabaja en la construcción de una rampa hormigonada a pocos metros del nuevo puente sobre una de las paredes del arroyo. La misma permitirá el ingreso de maquinas y camiones para la limpieza -en el futuro- del suelo en estos tramos. Por otra parte, resta demoler los dos pilotes que quedaron de pie, que eran la base del antiguo puente y la razón por la cual se construyó uno nuevo: en sus paredes se juntaban residuos que venían de “río arriba” e impedían el normal escurrimiento del agua generando anegamientos hacia los barrios en jornadas de mucha lluvia.
“Las obras hídricas se han convertido en una política de Estado en Lomas y, a pesar de todas las complejidades, progresamos como nunca antes con el propósito de terminar con las inundaciones. Este proyecto es uno de los tantos que llevamos adelante en el marco de la canalización y saneamiento de la cuenca del Arroyo del Rey e incluye mejoras que benefician a la calidad de vida de los vecinos”, señaló el Intendente, Martín Insaurralde.
Este nuevo cruce tiene las mismas características que los de Laprida y Colombres: es más alto y sin columnas ni pilares intermedios. Además, cuenta con pasos peatonales de ambos lados y barandas de protección. En cuanto al tránsito, tiene dos carriles (uno de ida y otro de vuelta) y pasan unos 30 vehículos por minuto (en las horas pico) incluyendo líneas de colectivos como la 540, la 406 y “la Costera”.
En esta zona, además, el canal de hormigón tiene diez metros de ancho y cuatro de alto, lo que lo habilita para acumular una enorme cantidad de agua que antes, sin ese espacio, se metía en los barrios aledaños.
“El nuevo puente fue hecho con vigas de 16 metros de longitud lo que permite que sigamos teniendo un conducto de 10 metros de ancho en esta parte de la cuenca. Por encima del puente, la obra esta terminada y en breve finalizaremos este tramo por debajo para continuar con la construcción de los cruces que aún restan a lo largo de los 10 kilómetros canalizados que tiene el Arroyo del Rey”, explicó Néstor Tacchi, ingeniero a cargo de la obra.
UN AVANCE PARA EL BARRIO. Los vecinos que viven en los barrios ubicados a la vera del Arroyo se vieron beneficiados por estas obras ya que, además de dejar atrás los años de inundaciones, recibieron mejoras de infraestructura. Entre otras cosas, se hicieron pavimentos donde había tierra, se crearon sumideros en las zonas donde se acumulaba el agua y, en las próximas semanas, la Delegación de Lomas Oeste sembrará árboles y plantas en los espacios verdes que quedaron pegados al canal.
“Los vecinos de esta zona de Lomas sufrían inundaciones en días de mucha lluvia y con la canalización y saneamiento del Arroyo, hoy viven otra realidad. La mejora de toda la infraestructura urbana de la zona fue clave para mejorar su calidad de vida”, sostuvo el Delegado de Lomas Oeste, Gabriel Gago.