Banfield no se perdió en el bosque, ganó y se metió en la conversación
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Al equipo de Falcioni no lo asustó el Lobo y se impuso con autoridad en La Plata. Con 51 puntos acaricia la Copa Libertadores y sueña con algo más. Goles de Renato Civelli y Darío Cvitanich.
Para el aplauso. Una campaña formidable de Banfield que, persiguiendo su objetivo de entrar a la próxima Copa Libertadores, se anima a pelear el campeonato.
El equipo de Julio Falcioni alcanzó los 51 puntos, una cifra envidiable y necesaria para sentarse en la mesa de los protagonistas y mostrar sus credenciales. No luce, no brilla, pero hace fácil lo complicado. ¿Jugó un buen partido en La Plata? Futbolísticamente no, estratégicamente sí. Y le alcanzó para vencer con lo justo a Gimnasia por 2-1.
Este Banfield resuelve jeroglíficos a la perfección, sostenido en su columna defensiva, donde Renato Civelli es la voz de mando y experiencia, con un mediocampo donde Remedi y Cecchini se reparten los roles de quite y juego, dos extremos desequilibrantes como Bertolo y Sperdutti, con más lucidez del primero, un Sarmiento al que le alcanza con sus intermitencias y adelante Cvitanich, el que resuelve aún (como ayer) sin estar en su plenitud física.
Se estudiaron mucho y jugaron poco. Feo primer tiempo, con roces y pelotazos. Pero Banfield supo sacarle provecho a una pelota parada y facturó. Tiro libre de Sarmiento al palo y de rebote la metió Civelli cuando se bajaba la persiana del primer tiempo.
En el complemento se replegó y perdió nitidez. También con poco, el Lobo lo empató a balón parado. Córner de Alemán y anticipo de cabeza de Mauricio Romero. Banfield buscó meterse rápido en el partido.
Un cabezazo de Cvitanich fue resuelto por Arias, pero en el otro, el de Baradero no lo erró al arco y puso adelante a su tropa. Gimnasia se desesperó metiendo pelotazos, Civelli y sus laderos del fondo (sumados a Sporle y Corcho Rodríguez) sacaron todo.
Y Banfield se terminó llevando del bosque una victoria muy copada para entrar a la próxima Libertadores 2018 (le sacó cuatro puntos a Estudiantes de La Plata), que además, le sirve para meterle presión al puntero. Soñar no cuesta nada.
Cómo no hacerlo, si la última victoria en 60 y 118 había sido en el Apertura 2009, con gol de Santiago Silva. Después, hubo vuelta olímp