Keith Richards, que no detiene su marcha, cumple 75 años
Sigue rodando. El guitarrista de los Rolling Stones nacía el 18 de diciembre en 1943 en plena guerra. De aquella infancia difícil, a sus riffs de guitarra, su vida personal y una gira que comienza en pocos meses.
Para muchos fans de los Rolling, su Stone favorito es Keith Richards, incluso muy por encima de Mick Jagger y del resto de los integrantes de la banda británica.
Este genial guitarrista, que supo completar el formulario del rockero clásico, con sus luces y sombras incluidas, cumple este martes 75 años de agitada vida, que van desde su nacimiento en plena guerra, a sus últimas confesiones, como la de haber decidido dejar el alcohol.
“Es hora de abandonar. Igual que todas las otras cosas”, le dijo a la revista Rolling Stone, en referencia a su adicción en el pasado a la cocaína, la heroína y otras drogas duras.
Keef, su apodo familiar, nació el 18 de diciembre de 1943 y creció en un hogar obrero de Dartford, al Este de Londres, en plena Segunda Guerra Mundial, mientras las bombas caían cerca de la casa de Richards.
Su infancia no fue del todo fácil y la música le llegó a través del legado materno, incluyendo una guitarra usada comprada por escasas siete libras.
Buena parte de la vida de Keef está en “Vida”, su autobiografía, que acaba de ser reeditada en castellano. Allí cuenta su infancia en Inglaterra, su juventud y la obsesión por los discos de Chuck Berry y Muddy Waters.
También cuenta el comienzo de los Rolling Stones, las primeras drogas y los inmortales riff de guitarra, que son una marca registrada.
Incluye su relación con Anita Pallenberg, su pareja por más de una década y que antes había sido la novia de Brian Jones, por entonces compañero de banda de Richards y que fallecería poco después en dudosas circunstancias.
Con Anita fue padre de Marlon, nacido en 1969, y su nombre fue en honor a Marlon Brando, amigo de la pareja. En 1972 llegó Dandelion Angela y cuatro años después nació Tara, que falleció por muerte súbita con apenas diez semanas.
Además, dedica páginas al exilio fiscal en Francia, cuando los Rolling se recluyeron en la Costa Azul, los incendios forestales en los Estados Unidos, el aislamiento por algunas temporadas y las adicciones de la que supo entrar y salir.
Keith se refiere también al amor con Patti Hansen, con quien está en pareja desde 1983. Ambos son padres de Theodora y Alexandra, devenidas en las dos mejores consejeras del músico.
Keef cuenta su distanciamiento con Jagger y la posterior reconciliación, en un vínculo que tuvo idas y vueltas en estos más de 50 años de compartir una banda.
Amante del blues y gestor también de una carrera solista, que se desarrolló en los huecos que le dejaban sus giras con los Stones, Keith Richards, a sus 75 años, sigue en plena vigencia con una gira de los Rollings por los escenarios europeos que comenzará en abril del año próx