Se rearma la Trova Rosarina
Va de retro . Baglietto, Garré, Fandermole, Abonizio, Goldín y Gallardo serán parte de este reencuentro en Cosquín.
Corría 1982 y la música en inglés se había prohibido en las radios y en la televisión por el conflicto bélico de las Islas Malvinas, como si John Lennon y Paul McCartney fueran responsables de esa guerra en el Atlántico Sur.
El rock argentino, censurado y cajoneado por el Gobierno militar, irrumpió en los medios de golpe ante la prohibición de los temas anglosajones, con un enorme abanico, que incluía también a la denominada Trova Rosarina.
Todos ellos ya tenían un buen recorrido en la Rosario natal y bajaron a Buenos Aires con un verdadero seleccionado encabezado por Juan Carlos Baglietto, con una voz prodigiosa y un enorme carisma.
Este combo tenía la voz angelical de Silvina Garré, que mantiene su gola y su registro intacto. Mientras que Baglietto se nutrió de las composiciones de las pródigas plumas de sus coterráneos, como Jorge Fandermole, Adrián Abonizio y Rubén Goldín, este último también era el guitarrista de su banda.
También se le sumó como compositor y como músico de su grupo un adolescente desgarbado, con diez dedos largos y flacos y unos gruesos anteojos. Un Fito Páez recién salido del Normal 1 de Rosario ya era un prodigioso pianista y componía como un veterano.
Baglietto lanzó en 1982 “Tiempos difíciles” con “Mirta de regreso”, de Abonizio, y “Era en abril”, de Fandermole, que tuvieron un efecto inmediato en el público.
También estaban en el álbum “La vida es una moneda”, de Páez, y la spinetteana “Sin luna”, de Goldín, entre otras canciones.
Mientras el Rock Argentino se modernizaba y se lookeaba con los raros peinados nuevos, la Trova Rosarina remitía desde su estética y desde sus canciones al espíritu de los ‘70, con melenas y jardineritos incluidos.
“Tiempos difíciles” fue un furor de ventas en ese momento y siguió vendiéndose como pan caliente por mucho tiempo. En el mismo 1982, Baglietto, con su mismo equipo creativo, editó “Actuar para vivir”, con un tema de Fito como título del álbum, también de gran respuesta.
Luego Sivina Garré, Rubén Goldín y, en especial, Fito Páez hicieron su propio camino. También Abonizio y Fandermole, con su exquisita pluma, tomaron su rumbo, sin dejar de proveer a Baglietto de canciones.
Todo vuelve. El regreso de varios de los puntales de la Trova Rosarina: Juan Carlos Baglietto, Silvina Garré, Jorge Fandermole, Adrián Abonizio, Rubén Goldín y Fabián Gallardo será en el 59º Festival Nacional de Folklore de Cosquín, en la noche de este sábado, para mostrar una porción del camino trazado por este grupo de músicos y su enorme aporte a la cultura popular argentina.
El festival, que se extenderá hasta el 3 de febrero, incluye a artistas taquilleros pero además permitirá saludar los 30 años de la consagración de Chango Spasiuk, el debut de Dos más Uno, los cruces de Bruja Salguero con Eruca Sativa y de Los 4 de Córdoba con Las Pastillas del Abuelo, además de un variado homenaje a Mercedes S