Por la crisis, tuvo que cerrar un bar cultural de Lomas
Fonrouge 176. ?Normanda? había abierto sus puertas en octubre del año pasado, pero a pesar del esfuerzo, no pudieron mantener el lugar dedicado al arte.
“Ya no se pudo sostener más el espacio y no quedó otra que cerrar”, contó con tristeza, Nehuén Wolf, el artista plástico y uno de los creadores del Bar Cultural Normanda, sobre la situación que intentaron que nunca suceda, pero la situación económica por la que atraviesa el país convirtió al lugar en una víctima más de la crisis.
En Fonrouge 176, Lomas está la casona que pertenece a la familia de Nehuén, la cual nunca quisieron vender por el valor emocional que tiene para ellos, que refaccionaron especialmente para convertirla en un espacio para difundir el arte y la cultura, pero no se pudo sostener por la cantidad de impuestos que debían pagar y el poco público que asiste en invierno.
“Quisimos hacer todo legal, contratamos a 14 empleados que dieron lo mejor, pero tenemos la esperanza de poder volver a abrir si la situación cambia”, detalló Wolf que aclaró que el lugar seguirá por el momento abriendo los jueves de 15 a 19 porque funciona una feria y se podrá contratar para eventos llamando al 1127144801 o Instagram: @normanda.barcultural<